Petristas se movilizan a favor del Alcalde
La movilización permanente convocada por el alcalde Gustavo Petro avanza a paso lento. Desde que se conoció la ratificación de la Procuraduría de destituir e inhabilitar al alcalde Petro por 15 años empezó a gestarse una movilización liderada por los mismos sectores que aparecieron en marchas anteriores: cabildos indígenas, grupos LGBTI, ciudadanos provenientes de otras ciudades del país, antiguos militantes del M-19 y trabajadores de Aguas de Bogotá.
Uno de los primeros manifestantes que tomó la vocería en la Plaza de Bolívar fue el Representante a la Cámara Iván Cépeda, del partido Polo Democrático: «Es la ratificación de una decisión arbitraria. El procurador intenta evitar a toda costa que se lleve a cabo el proceso de paz. Demuestra que un líder de izquierda no puede gobernar una ciudad como Bogotá. Petro se la jugó por lo público. Es un mal mensaje para los diálogos en la Habana porque lo que quiere decir el procurador es que no hay garantías para que la guerrilla deje las armas», dijo.
En el paisaje están incrustadas las carpas de algunos ciudadanos que decidieron, desde el 9 de diciembre de 2013, movilizarse permanentemente para que Petro no se quedara en el Palacio Liévano. Juan de Dios es un hombre que pasa los 50 años. Llegó desde Cúcuta en diciembre, luego de ser desplazado por la violencia: «Fueron tres días de basura y por eso lo quieren dejar sin hacer política 15 años. Para él es una decisión injusta y por eso hay que manifestarse. Aunque muchos de los que estamos quedándonos en las carpas estamos protestando por más causas: como el derecho a la salud y el derecho a una indemnización como víctimas. De todas maneras no tenemos a dónde irnos, porque la mayoría de personas que están acá son personas que llegaron de otras ciudades y que se quedaron sin casa». Había cerca de 20 carpas alrededor de la estatua de Simón Bolívar.
Antiguos militantes del M-19 han sido fieles a la manifestación: «Era una decisión esperada. Por eso no podemos movernos de la Plaza de Bolívar. La mayoría somos gestores de paz, líderes indígenas, víctimas de la violencia. Estamos tranquilos porque la pelota está del lado del presidente y sabemos que él guarda, todavía, una esperanza en la paz» , dice Germán Londoño, gestor de paz y simpatizante del movimiento político del alcalde Petro. Otros fueron, sin embargo, los argumentos de una de las voceras de la manifestación a favor del alcalde; Teresa Muñoz, antigua secretaria de Integración Social y líder del movimiento de «indignados e indignadas Petro no se va», le dijo a este diario que la manifestación de hoy se diferencia de las demás porque «estamos consternados, indignados y rabiosos. La movilización del viernes fue distinta porque esperábamos que el procurador Alejandro Ordóñez reflexionara sobre su decisión. Hoy hacemos un llamado a toda América Latina para que se movilice por la democracia y la paz. Atendemos el llamado a la movilización pacífica, pero estamos muy rabiosas».
En términos logísticos, el movimiento de «indignados» ha optado por establecer una tarima e instalar parlantes en lugares estratégicos de la Plaza. Agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) llegó a la Plaza pasadas las tres de la tarde. La guardia indígena también hizo presencia en el lugar. Víctor Jacanamijoy llegó desde Putumayo en diciembre del año pasado: » Tenemos miedo de que existan represalias por parte del Procurador. Los cabildos en Bogotá se verán afectados porque el alcalde estuvo del lado de los indígenas. No vamos a utilizar la violencia, pero sí queremos que este movimiento sea visible, que el procurador sepa que el alcalde no está solo».