Bello es el fútbol
Por Esteban Jaramillo Osorio.
Hay entrenadores y críticos en Colombia que, por desconocimiento o capricho, niegan la importancia actual del futbolista con el balón o sin el, en creación y en marca. ¿Han visto a James y a Cristiano? ¿A Falcao o a Rooney? Son de toda la cancha.
A propósito, es bello el fútbol cuando se cuida y se mima la pelota. Cuando la táctica es la inteligencia del juego y cuando el gol sacia el apetito de los aficionados, con estadio lleno. El “ida y vuelta” de James en el clásico español, fue el fútbol total en un equipo consolidado en lo táctico y en lo técnico. James fue trasparente en su juego y aunque “encadenado” en una parcela, exhibió su repertorio de paradas y controles, de esquives y pases, con influencia apreciada en su equipo en la maniobra ofensiva. Cuantas galopadas con espacio, fabricando líneas de pase, cuanta voracidad frente al área conectando zonas y cuantos momentos de irritación cuando sus compañeros no lo veían.
Su equipo fue como el buen periodismo: directo, elaborado, sin márgenes de error y bien documentado. Dio un repaso con su fútbol funcional, con presión, recuperación y transiciones veloces de ida y regreso, para un rendimiento superlativo en todas las fases.
Momentos dulces los del colombiano, haciendo historia con carácter y entusiasmo. Nunca fue inferior al reto, codeándose con lo más granado del mundo, ante la bendición de un entrenador que sabe de sus facultades y las explota con prudencia.
El Real con planteamiento moderno, sin revolucionar sus líneas, apoyado en el pase rápido, el juego colectivo y directo, encontró los remedios para desactivar el carnaval solemne de toques con que Barcelona anestesia los partidos.
Asistimos los colombianos al ejercicio de impotencia de Messi y su corte, Neymar incluido, y a la soberbia actuación del Real Madrid, equipo en el que James Rodríguez da muestras de convivencia, sin presión, con soltura, con desfachatez quizás, con voluntad y acierto, participando en las sociedades resolutivas que buscaron constantemente el área del Barcelona, para lograr el acople esperado a un rocoso equipo de valorada producción.
¿Alguien recuerda el color de la pelota, peleas o provocaciones, fallos gruesos arbitrales o expulsiones? Qué bello es el fútbol.