Investigan muerte de niño por aparente negligencia de EPS
. Se trata de Miguel Ángel Vargas Saavedra, un niño de 22 meses que perdió la vida hacia las 2 y 30 de la madrugada de este miércoles, luego que su estado de salud se complicara gravemente por aparente negligencia de las instituciones.
El menor, quien finalmente perdió la vida en la Clínica Colombia, a donde fue trasladado el pasado lunes, ingresó el 15 de Septiembre a la Clínica Calambeo de Ibagué, donde fue diagnosticado con una deformidad en su tobillo izquierdo.
Sin embargo, su estado se agravó durante la hospitalización, requiriendo atención médica especializada, la cual no fue otorgada de manera expedita, obligando a sus padres a interponer una acción de tutela ante el Juzgado Tercero Penal Municipal de la capital tolimense, recurso que fue elaborado por la Defensoría del Pueblo Regional Tolima y presentado por Ángel Vargas Villarreal, padre del bebé. Dicha instancia se pronunció el 19 de Septiembre, ordenando una medida provisional dirigida a la EPS Sánitas, a la cual estaba afiliado el niño para que actuara inmediatamente a fin de proteger la vida del pequeño.
Sin embargo, el Juzgado tuvo que pronunciarse de nuevo el 23 de Septiembre, cuando Miguel Ángel ya se encontraba en la Clínica Nicolás de Federmán, en Bogotá, porque la EPS no había dado cumplimiento a la medida provisional y porque según el Juzgado no se le habían prestado los servicios requeridos en ese centro asistencial.
Sólo cuando los medios de comunicación intervinieron y la Delegada para los Derechos de la Salud y la Seguridad Social de la Defensoría del Pueblo tomó contacto con la EPS y con las directivas de la Clínica Nicolás de Federmán, se ordenó el traslado de Miguel Ángel Vargas Saavedra a un centro hospitalario de mayor complejidad, como es la Clínica Colombia, para que recibiera los cuidados necesarios.
Lamentablemente, la condición del niño ya era bastante delicada y de acuerdo con el reporte médico entregado a sus familiares en las últimas horas, el menor recayó hasta presentar un cuadro de meningitis e hidrocefalia que lo condujo a su muerte.
La Defensoría del Pueblo condena la presunta negligencia de las instituciones comprometidas, urge al Ministerio de Salud y a la Superintendencia del ramo para que agilicen las investigaciones por este caso e impongan las sanciones a que haya lugar, y solicita se dispongan los mecanismos de reparación correspondientes para sus seres queridos.
Finalmente, la Defensoría coordinó el acompañamiento de un equipo de profesionales para brindar soporte sicosocial a la familia, y de la misma manera ofrecerles el apoyo jurídico de la Entidad.