Lamento indígena
Hay algo en la esencia de los pueblos que resulta persistente: lo cósmico y lo terrígeno. El negro, el indígena, el hombre antiguo encarnan conceptos que no coinciden con la mentalidad occidental, pero eso no puede dar pábulo para descartar herencias que pertenecen a la composición natural de nuestras raíces. René Rebetez
Por: Lorena Rubiano Fajardo
‘El rayo fue un castigo’: Dijo el Mamo Ramón Gil, autoridad de los Wiwa uno de los indígenas tradicionales que sobrevivió a tragedia de la Sierra Nevada, donde murieron 11 indígenas del pueblo ancestral kemakúmake cuando un rayo cayó sobre la unguma, choza ceremonial donde estaban reunidos unos 50 Wiwas de la cuenca media del río Guachaca.
En medio de sus conocimientos y cosmogonía, expreso que “ahora va a venir la guerra de la naturaleza contra la humanidad, porque hace dos años ella le había advertido que debían pagar por tantas talas y saqueos que se han realizado en estas montañas”.
Sostienen los Mamos que poco a poco la Madre Tierra se está muriendo. Y que lo que fuera un paisaje cargado de símbolos míticos de fauna y flora en armonía con el hombre, se ha ido transformando en una suerte de recuerdo. La Pachamama, parece enviar mensajes que muchas veces nos resistimos comprender.
De manera que expresamos nuestra solidaridad total con nuestros hermanos indígenas, que les hacemos llegar a través del mamo y maestro Arwua Vicku, de la familia Isquierdo. Y llamamos la atención del gobierno y del país sobre los atropellos y destierros que viene sufriendo los indígenas del Casuca y del Putumayo por parte de la guerrilla y de bandas criminales que los desalojan y expropian sus propios territorios.
Es lamentable que hijos y familiares de la Organización Gonawindua Tayrona hayan culminado de esta manera un encuentro que los convocó precisamente para hablar sobre la salvaguarda de la tierra.
Hoy el sonido del canto de estos pueblos indígenas Wayúu, Kogui, Arhuaco, Wiwa y Kankuamo es un lamento. Para los hijos de la tierra y el maíz que han sido sometidos al destierro o a la extinción como si aún la conquista no hubiese terminado como lo fue la “Masacre de Bahía Portete” ocurrida el 18 de abril de 2004.
Para el mamo mayor Vintukua Camilo Izquierdo pasa por no “educar al hermano menor, porque él es como un niño. Hay que enseñarle que su pensamiento y su corazón entiendan que cada sitio es como un templo lleno de saberes, lleno de conocimiento, lleno de contenido”.