Cámara Colombiana de la Infraestructura alerta por bajos índices de ejecución en el Distrito
El Observatorio de Contratación de la CCI, enciende las alarmas por los preocupantes desembolsos presupuestales que, durante lo corrido de este año, se han hecho para poner en pie proyectos relacionados con el sector movilidad en la capital.
En su más reciente informe, el Observatorio de Contratación de la CCI llama la atención sobre los preocupantes índices en materia de ejecución presupuestal que -en lo corrido de 2014- han mostrado las entidades que integran el sector movilidad en la capital: Secretaría de Movilidad, Unidad de Mantenimiento Vial e Instituto de Desarrollo Urbano, la cual en su conjunto al 31 de octubre del año en curso no supera las autorizaciones de giro (pagos) el 3% de los recursos asociados al programa de Movilidad Humana. A juicio de la CCI, la entidad más crítica es el IDU, que cuenta con presupuesto disponible de $1.6 billones de pesos, de los cuales ha comprometido $436 mil millones, pero de estos sólo ha pagado por obras ejecutadas $15 mil millones que corresponden al 0,93% de la vigencia.
Ahora bien, igualmente preocupante para el gremio de la construcción, la ejecución presupuestal de las 20 alcaldías locales, que tienen bajo su responsabilidad la malla vial local, la cual en nuestra ciudad es el 55% de la totalidad de la red de vías de la capital. El corte a 31 de octubre muestra que los pagos realizados con cargo al presupuesto 2014, de obras que se desarrollan para la movilidad, es decir, vías y/o espacio público, tan solo llegan al 9,6%, es decir, $28 mil millones de un total de $297 mil millones de pesos.
Para Jorge Marín, Vicepresidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, es “desalentadora y frustrante la gestión de la actual administración central y la de sus localidades en el sector movilidad. El Plan de Desarrollo previó inversiones para cuatro años en infraestructura para la movilidad de $15 billones de pesos. Se aprobaron modificaciones al cobro por valorización y se aprobó un cupo significativo en endeudamiento. Así las cosas, se demuestra que el problema no era de recursos, sino de incapacidad gerencial”.
