Falleció patrullera que había sido impactada en tiroteo en la Policía
La Policía Nacional informó que la patrullera Martha Isabel Correa, quien resultó herida tras un tiroteo presentado durante la tarde de este miércoles en la Dirección de la institución, en Bogotá, falleció pese a los esfuerzos de los médicos del Hospital de la Policía.
La mujer había resultado herida luego de que un patrullero «accionó su arma de dotación contra la patrullera y un oficial de la institución que salió a verificar la agresión».
Fuentes extraoficiales informaron que los hechos ocurrieron en el tercer piso de la Dirección Nacional de la Policía, al occidente de Bogotá, a las 2 y 10 de la tarde. La institución afirmó en el comunicado que, al parecer «las primeras indagaciones darían cuenta de un asunto sentimental y es investigado por unidades de policía judicial».
Pasadas las dos de la tarde, según información de personas que conocieron los hechos de primera mano, el patrullero Manuel Bobadilla, quien hace parte de la guardia de seguridad de la sede de la Policía subió al tercer piso y se dirigió hasta la oficina de asuntos internacionales, en donde trabajaba la patrullera Martha Isabel Correa.
Al llegar a la puerta de la oficina, llama a Correa con quien al parecer tenía una relación sentimental y vivía desde hace un tiempo. Cuando ella se le acerca el policía saca su arma Sig Sauer, calibre 9 milímetros, que era su arma de dotación, y le dispara en el pecho. Personas que estuvieron en el lugar aseguran que Bobadilla activó el arma por lo menos seis veces.
Tres de los disparos los recibió la patrullera Correa. Un mayor de la Policía, identificado como Ricardo Alberto Romero Sanabria, quien salió a verificar el incidente, fue impactado dos veces, una en el brazo, y otra en su parte trasera.
Tras la agresión contra la patrullera y el mayor, Bobadilla intentó suicidarse y se disparó en la cabeza.
Según el director de la Policía, general Rodolfo Palomino, en este momento avanza una investigación disciplinaria, a cargo de la inspección general de la institución, y otra de tipo penal, que adelanta la Fiscalía, para tratar de aclarar lo sucedido.
La patrullera Correa, según información extraoficial, antes de trabajar en asuntos internacionales, en donde cumplen sus funciones 13 personas, laboraba junto con Bobadilla en la guardia de la sede de la Policía.
La institución afirmó que al presentarse este hecho «fueron activados los protocolos de seguridad y primeros auxilios».
El policía que disparó tenía un arma dentro de la institución porque hace parte de la seguridad y era guía canino. Solo los encargados de la seguridad de esta sede pueden portar armas dentro de las instalaciones.
La Policía dijo que «las actividades laborales dentro de las instalaciones se desarrollan de manera normal, salvo lo atinente al aislamiento del lugar de los hechos, en tanto se producen las labores propias del dictamen pericial».