James Rodríguez marcó en el triunfo de Real Madrid sobre Espanyol
El bonito gol de James, la espectacular falta que transformó Bale y el tanto de Nacho dieron los tres puntos al Real Madrid, que jugó 40 minutos con uno menos.
El Real Madrid sigue firme en el liderato. Los blancos golearon al Espanyol, pese a jugar 40 minutos con un futbolista menos por la expulsión de Coentrão, y terminaron además imbatidos. Desde el inicio demostraron que iba a ser difícil que no sumaran tres importantes puntos en su primer partido del año en el Santiago Bernabéu. En poco más de diez minutos ya habían estrellado un balón en el poste y estrenado el marcador.
Benzema lo intentó primero de volea en un balón que llegó rechazado tras un saque de falta, pero su disparo, complicado debido a la altura que cogió el esférico, se encontró en el 10’ con la madera. El tanto llegó en la siguiente ocasión de los blancos. Todo fue al primer toque y tan difícil de ejecutar que añadió belleza al mismo. Bale cambió el juego de banda de forma maravillosa, Cristiano Ronaldo se inventó una asistencia a bote pronto con la izquierda y James, llegando desde atrás, batió a Casilla de primeras con un remate sutil.
Si Bale deleitó al público del Bernabéu en el primer gol con un cambio de orientación medido, en el segundo levantó al público de sus asientos con un magistral lanzamiento de falta que golpeó en el poste antes de superar a Casilla en el 28’. En menos de media hora, el Real Madrid ya había dado un golpe de autoridad y encarrilado el encuentro.
Con diez en el campo
No empezó la segunda mitad de la mejor forma. A los ocho minutos, los blancos se quedaron con diez futbolistas al ser expulsado Coentrão en un balón dividido con Cañas. Tuvo que reaccionar Ancelotti, que dio entrada a Nacho por James para equilibrar a su equipo.
Pese a estar en inferioridad numérica, los madridistas tenían las oportunidades más claras y cerca estuvieron de marcar el tercero. La jugada la inició Arbeloa en el 59’ con una maniobra en la que se marchó de dos rivales en la banda izquierda y la finalizó Cristiano Ronaldo con un disparo desde la frontal que se marchó a escasos centímetros de la portería de Casilla. Nueve minutos más tarde pudo firmar Bale el doblete, pero su remate de cabeza tras el centro de Nacho se paseó por la línea de gol.
El galés fue de nuevo protagonista. Isco recibió en la medular en el 72’ y dio un preciso pase entre líneas a Bale, que no pudo superar a Casilla en el mano a mano. El tanto estaba próximo y llegó cuatro minutos más tarde. La jugada fue para enmarcar. De hecho, prácticamente participaron los nueve futbolistas de campo. La forma en la que terminó habla por sí sola. Arbeloa, que ocupó el lateral izquierdo tras la expulsión de Coentrão, fue el que asistió y Nacho, su homólogo por la derecha, la finalizó y cerró la goleada.