Consejo de Ministros aprobó un aplazamiento de $6 billones en el Presupuesto General de la Nación para 2015
Dosquebradas, Risaralda, 21 de Febrero_ RAM_ De manera preventiva y con el ánimo de reafirmar el compromiso del Gobierno Nacional con la sostenibilidad fiscal, el Consejo de Ministros, en su sesión de este sábado, aprobó un aplazamiento de $6 billones en el Presupuesto General de la Nación para 2015.
Con esta medida, se suspende la posibilidad de ejecutar las partidas aplazadas, hasta que cuenten con la autorización del Consejo Superior de Política Fiscal (Confis).
Lo anterior, en consideración con las nuevas condiciones macroeconómicas y fiscales, asociadas principalmente con la caída de los precios internacionales del petróleo.
El aplazamiento comprende $4,8 billones en el rubro de inversión y $1,2 billones en gastos de funcionamiento. Este monto representa una disminución en el presupuesto de inversión de 9,7% frente a lo aprobado por el Congreso de la República en octubre pasado.
Además del recorte de 10% en los gastos generales, ordenado por la Ley de Presupuesto 2015, y del congelamiento de la nómina, el Gobierno Nacional decidió aplazar $1,2 billones de gasto de funcionamiento. Esto complementa las medidas ya adoptadas y refuerza el compromiso de austeridad.
En este frente, todos los sectores del Gobierno han venido trabajando en un plan de austeridad, enfocado en reducir los gastos de funcionamiento y optimizar la estructura de sus entidades.
De esta forma, después del aplazamiento, el presupuesto de inversión pasa de $44,5 billones en 2014 a $44,7 billones en 2015.
Con base en la decisión del Consejo de Ministros, el Gobierno Nacional expedirá decreto de aplazamiento en los próximos días.
Si las condiciones que motivaron el aplazamiento cambian, las partidas afectadas podrán desaplazarse total o parcialmente y estar nuevamente disponibles para su ejecución.
En cualquier caso, según indicó el Presidente de la República, Juan Manuel Santos, se protegerá del aplazamiento los recursos destinados a atender a los más vulnerables, como población desplazada y víctimas de la violencia del conflicto interno.
De esta manera, se mantiene el compromiso del Gobierno Nacional con la disciplina y la responsabilidad fiscal y se preserva la creciente confianza en Colombia en medio de un entorno internacional complejo.