Mejorar la calidad del servicio de transporte individual de los vehículos tipo taxi al reformar las condiciones de contratación de los conductores, reglamentar un sistema de lujo de taxis y crear un fondo destinado a la preparación técnica para la prestación de un mejor servicio.

Hoy día las normas no cumplen con las necesidades del sector en lo referente a afiliación de los conductores: los contratos casi nunca son laborales, y usualmente son entre el conductor y el propietario; y las empresas no tienen un control directo y regular sobre los vehículos afiliados en lo referente a las obligaciones de afiliación.  No se cuentan con modalidades tipificadas de contratación que permitan cumplir tanto con las obligaciones laborales como con las expectativas de ganancias, dejándolos desprotegidos.

Debido a que no hay regulación para permitir un sistema de taxis de lujo este servicio sólo existe como opción intermunicipal y no dentro de las ciudades. Desde 1993 la ley contempla la posibilidad de este servicio.

·         Definir las modalidades de contratación permitidas para el transporte individual de pasajeros para garantizar la afiliación de los conductores al sistema de seguridad social.

·         Regular el sistema de taxi de lujo, permitiendo a las autoridades de transporte el autorizar el ingreso de taxis de lujo, limosinas, camperos y camionetas. Se establecen las condiciones mínimas que deben tener los vehículos, su vida útil, y la determinación de las tarifas.

·         Crear un fondo de capacitación y formación en el que todos los conductores puedan adquirir estudios técnicos, para que el servicio de transporte se formalice y profesionalice.

¿CUÁLES SON LAS MODALIDADES DE CONTRATACIÓN QUE PROPONE EL PROYECTO?

Las tres modalidades propuestas son:

§  Contrato laboral entre el conductor y el propietario del vehículo

§  Contrato laboral entre el conductor y la empresa de transporte

§  Contrato de administración o alquiler de vehículo entre el propietario y el conductor.

Todas estas modalidades aseguran la afiliación del conductor al sistema de seguridad social.

No. La posibilidad de este servicio ya existe en la ley. La Ley 105 de 1993 establece en su artículo 3° que “Se permitirán de acuerdo con la regulación o normatividad el transporte de lujo, turísticos y especiales, que no compitan deslealmente con el sistema básico”. De la misma manera el Decreto 171 de 2001 ya incluye el nivel de servicio de lujo intermunicipal, y el Decreto 170 de 2001 define el nivel de servicio de lujo como “el que ofrece a los usuarios mayores condiciones de comodidad y accesibilidad, en términos de servicio y cuyas tarifas son superiores a las del Servicio Básico”.

El proyecto lo que propone es reglamentar por primera vez el uso de dicha posibilidad dentro de las ciudades.

El proyecto propone la creación de un fondo de formación y capacitación de conductores de taxi –FONTAXI-, encargado de capacitar académicamente a todos los conductores, bien sean de servicio básico o de lujo, para que presten un mejor servicio.

Este fondo se encontrará administrado por una junta directiva conformada por representantes de todos los sectores que tienen relación con la prestación del servicio individual de pasajeros, y se financiaría por el aporte anual que deberán realizar las empresas, sumado a un porcentaje derivado de los aportes pagados por el sector al SENA y de las multas e infracciones de tránsito de los conductores de transporte público.