Por: Jorge Ivàn Castaño

Luego de asistir a la santa misa en el templo parroquial  oficiada por el presbítero Alberto Jaramillo, en la plaza principal  en la noche de ayer y con la asistencia de público, Marino Murillo tomó posesión como alcalde de Neira.

Autoridades civiles, eclesiásticas, Militares, de Policía y comunidad en general , acompañaron al nuevo mandatario de los neiranos en el acto de posesión. Se contó con la presencia del senador Mauricio Lizcano, quien impuso la banda  que acreditaba a Marino Murillo  como nuevo alcalde del municipio.

En su intervención el nuevo mandatario señaló:  «mi promesa es tener un pueblo incluyente y con progreso, y vamos a trabajar sin descanso, con el espíritu que nos ha dado esta tierra, con el ejemplo que nos da el hombre trabajador, voy a estar atento para dar un piso de seguridad».

 Murillo le hizo un llamado a los expendedores de droga para que se acerquen y miren cómo se construyen formas de sustento que los pueda alejar de estas actividades y así  proteger a la juventud. También agregó que no le va a temblar la mano para actuar, pero que tendrán oportunidades.