El uribismo insiste en que hay persecución política
_ “La persecución, así se coordine desde clubes y palacios, no deja de ser persecución”, escribió el Centro Democrático en un comunicado de respuesta al Gobierno y a los partidos de la coalición por la paz, que este jueves, justamente, le habían pedido al movimiento del expresidente Álvaro Uribe “no incendiar el país”.
Esto, en medio de la polémica suscitada por la captura a comienzo de semana del hermano de Uribe, el caballista Santiago Uribe, por presuntos nexos con el grupo paramilitar de ‘Los 12 Apóstoles’.
“Son múltiples las pruebas e indicios que terceros países y cortes internacionales conocen sobre la perversa sincronización del Ejecutivo y la Rama Judicial en contra de quienes, por el simple hecho de defender las banderas y las tesis del expresidente Álvaro Uribe Vélez, han sido sometidos a crueles e inhumanos juicios políticos en Colombia”, dice el comunicado del Centro Democrático.
“Se equivocan quienes creen que en Colombia habrá paz si, mientras indultan y dan elegibilidad a la verdadera subversión y al terrorismo, al mismo tiempo validan el encarcelamiento y el enjuiciamiento de quienes formaron parte del Gobierno que debilitó a dicho terrorismo hasta el punto de llevarlos a sentarse a dialogar con el actual Gobierno”, agrega.
El Centro Democrático sostiene que la captura de Santiago Uribe Vélez por parte de la Fiscalía, el pasado lunes, corresponde a una retaliación política por su oposición al Gobierno. Esta semana miembros de ese partido protestaron frente a la Casa de Nariño y en redes sociales varios llegaron a declararse “en rebeldía”.
Este mismo jueves, los principales partidos políticos habían reaccionado a lo que llamaron un “lenguaje incendiario” del uribismo y advirtieron sobre el riesgo de que comportamientos como ese puedan degenerar en “hechos de violencia”.
A ese llamado de defensa de la institucionalidad se sumó el propio presidente Juan Manuel Santos, quien afirmó que los “tiempos de persecuciones ya pasaron y no volverán”, en referencia, claro, a las denuncias de persecución política desde los tribunales judiciales que ha hecho la oposición.
