No hay ambiente para más impuestos
Por: Jorge Giraldo Acevedo
IQUIRA, HUILA, 03 de julio_ RAM_ Sí, “por favor, no más impuestos» es el grito o la frase que más se escucha en todos los niveles por parte de personas corrientes en Colombia y los mismos empresarios nacionales; claro que esta petición está más a cargo de los que denominamos ciudadanos de a pié.
En nuestro medio todo parece indicar que no se tienen en cuenta los principios de las economías en naciones poderosas y, en consecuencia, no se aprenden las enseñanzas en el sentido que los impuestos deben y tienen que ser ante todo justos y equitativos.
En clara consecuencia, todos debemos contribuir para que en Colombia no exista tanta corrupción, evasión, elusión, exenciones y deducciones tributarias; así no habrá necesidad de aumentar los impuestos y mucho menos el predial, gravamen que se causa por el hecho de tener una vivienda para vivir con la familia.
La administración de Bogotá propuso al concejo capitalino que el impuesto predial sea cancelado poco a poco o por mensualidades, a lo largo del año.
Aceptemos que la propuesta de Peñalosa está excelente para aliviar las cargas económicas de personas propietarias de un bien inmueble; pero, como casi todo, aquí también está lo negativo de esa iniciativa y es la de pretender un aumento de este gravamen hasta por el 25%.
El aumento del gravamen del llamado «impuesto predial», propuesto por el docto alcabalero Enrique Peñalosa Londoño, es algo indebido, desproporcionado, injusto, inequitativo, etc.etc.
Uno no se explica cómo es que las últimas administraciones de la principal ciudad colombiana, al igual que en Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Manizales y Cartagena, no se han dado cuenta los millones de reclamos que los propietarios de viviendas hacen anualmente con motivo del «impuesto predial» y la mal llamada «contribución por valorización»..
Además sobre la contribución por valorización ese aporte en Bogotá y las principales ciudades colombianas no se hacía antes y las obras y los gastos administrativos, nómina, etc., se financiaban en su mayoría con el impuesto predial.
Como es que se cobra «impuesto por valorización » cuando todos los habitantes de las mencionadas ciudades y otras más, afrontan la más grave situación de inseguridad, desempleo, pésimos servicios en la salud, a través de las EPS, y deficientes y caros servicios públicos.
Mejor dicho, nunca será conveniente el cobro del «impuesto por valorización» cuando todo está desvalorizado…