JOHN WICK: un nuevo día para matar
Por Joaquín Lepeley S.
Regresa a la pantalla grande una de los personajes más violentos del séptimo arte: John Wick un hombre solitario que vive para su peor y por su automóvil, aunque muchos hacen lo mismo. El caso es que después del éxito que tuvo la cinta del 2014 los productores decidieron producir una secuela en la que nuestro personaje es forzado a salir de su retiro. Un exsocio está planeando tomar el control de una oscura organización de asesinos italianos y John, atado por un juramento de sangre debe ayudarlo. Su misión lo hace trasladarse a Roma en donde deberá enfrentar, gracias a sus pericias, algunos de los asesinos más peligrosos y letales del mundo.
En el rol principal regresa el actor KEANU REEVES (Matrix-47 Ronin) junto a JOHN LEGUIZAMO (La Era de Hielo), LAURENCE FISHBURNE (Matrix-CSI), RUBY ROSE (XXX Reactivado) y el recordado actor FRANCO NERO entre otros.
Al frente de esta producción encontramos al actor, director y antes doble de riesgo CHAD STAHELSKI, un conocedor de las coreografías de películas de acción lo que le da un realismo total a la puesta en escena.
El singular reencuentro entre Reeves y Fishburne hace que el cinéfilo geek y amante de la saga Matrix sienta una evocación a sus personajes y charlas sobre la verdad de las cosas.
Acción, suspenso y crimen que, se estima, tuvo un costo superior a su antecesora del 2014 cuyo valor ascendió a los U$20.000.000 millones de dólares y que en taquilla superó los U$ 78.000.000 millones de dólares en todo el mundo.
Un filme surrealista de salido comic que impacta por sus escenas: una colección de golpes y disparos que cortan la respiración y un guion atractivo que deja las puestas abiertas para una próxima cinta.