Campañas de odio invaden la política Mundial
En los últimos días la paranoia invade todos los estamentos de la política mundial. En momentos de crisis cuando más unido debe estar el mundo para evitar enfrentamientos y de pronto confrontaciones armadas incalculables, aparecen estos brotes de insensatos líderes que se dedican no a controvertir ideas o tesis, sino que recurren a prácticas insensatas y peligrosas.
Tenemos varios ejemplos, la paranoia antirusa en los Estados Unidos, alcanza una escalada sin precedentes que solamente encuentra parangones en los tiempos de la guerra fría.
Entonces con esos escándalos periodísticos mediáticos, han logrado maniatar la casa Blanca y tenerla como rehén del establecimiento político de ultraderecha de los norteamericanos.
Así el presidente Trump, no puede adelantar gestión o dialogo alguno con Moscú, sobre varios e importantes temas mundiales, porque de inmediato le dicen que esta confabulado o aliado con los rusos. En una diplomacia mundial abierta y sincera, es necesario desarrollar actividades conjuntas no solo en beneficio de los países que las realizan sino en también en favor del resto del planeta. No es entendible que ni siquiera puedan hablar de los asuntos bilaterales y de cooperación, porque de inmediato los tildan como de dependencia y control por parte de Rusia.
Se ha llegado hasta la histeria de que todo lo que haga Trump en favor de la paz y el entendimiento mundial, los demócratas lo utilizan en contra de su gobierno.
Y a esta tarea lastimosamente se han unido varios medios de comunicación, que se alejan de sus postulados periodísticos para sumarse a campañas difamatorias y mentirosas porque lo hacen sin prueba para desacreditar al presidente Trump y a su familia.
En su momento Ucrania apoyo a la candidata Hilary Clinton y nadie dijo nada, mientras que a Trump le graban y filman miradas y detalles cuando se saluda o encuentra con el presidente Ruso Vladimir Putin, para enseguida especular que hasta se entregaron mensajes secretos. Les miden hasta el apretón de manos, si fue más largo y fuerte que a los otros presidentes, como cuando se encontraron en la reunión del G/20 . Nada dijeron del abrazo fuerte con Macron, sino del saludo cordial con Putin.
Esas son niñadas, posiciones infantiles que sobrepasan la mesura y el entendimiento que debe existir entre los gobernantes de los países.
Se recuerda que fue la misma estrategia que utilizaron contra el presidente Juan Manuel Santos con respecto al acuerdo de paz firmado con las Farc/Ep . Con mentiras y chismes lograron asustar a los colombianos para que votaron en contra del acuerdo en el plebiscito.
Ahora están también sin discurso al ver que la paz es una realidad en nuestro país. Nadie entendió como un pueblo voto en contra de la paz.
De manera que hay que saber recibir las noticias mundiales con mesura y en el entendido de que su origen no siempre está basado en la verdad y en la realidad política mundial, sino que obedece a intereses personales y políticos de líderes huérfanos de poder y a una prensa amarillista e irresponsable.
