El huracán Irma azota el estado de la Florida con fuertes vientos y lluvias
Por The New York Times
Después de causar devastación en el Caribe y originar una de las evacuaciones más grandes de la historia de Estados Unidos, el huracán Irma azotó los Cayos de Florida el domingo por la tarde y luego volvió a tocar tierra en el suroeste de la península.
El huracán, que se debilitó a categoría 2, llegó a la costa occidental con vientos de 160 kilómetros por hora, según el Centro Nacional de Huracanes. “Lo mejor que puedes hacer en este momento es orar”, dijo el gobernador de Florida, Rick Scott el domingo por la tarde.
Aunque Irma se degradó, las autoridades advirtieron que “seguiría siendo un poderoso huracán”. La policía de Marco Island, población que estuvo en el ojo del huracán, reportó ráfagas de viento de hasta 210 kilómetros por hora.
Temprano en la mañana, la tormenta golpeó los Cayos de la Florida mientras los canales de noticias mostraban casas enteras bajo el agua y una persona parada en un balcón, casi sumergida.
Las fallas en el suministro eléctrico afectaron a más de 2,3 millones de personas en todo el estado y se extendieron por horas. No funcionaban los canales de televisión para mantener informados a los residentes, por lo que muchos atesoraban las baterías de sus teléfonos celulares para poder mantenerse en contacto con el mundo.
Se espera que la máxima potencia de Irma se haga sentir el domingo por la noche en grandes ciudades del estado, como San Petersburgo y Tampa, según Andrew McKaughan, un experto del Servicio Nacional Meteorológico (NWS, por su sigla en inglés).
“Todos tenemos un plan hasta que nos dan un puñetazo en la cara”, dijo Bob Buckhorn, el alcalde de Tampa en una conferencia de prensa en la que parafraseó al boxeador Mike Tyson. “Bueno, estamos a punto de recibir el puñetazo en la cara”.
Irma se encuentra en Naples, Florida, desplegando fuertes vientos y precipitaciones de tres y cuatro metros sobre el nivel del suelo durante la noche del domingo, dijo Stephen Shiveley, investigador del NWS en una entrevista. “En mi carrera meteorológica, esta es la tormenta más poderosa que he visto”.
Los funcionarios de Florida ordenaron la evacuación de más de 6,5 millones de residentes. Varios condados, incluyendo Miami-Dade, Collier y Lee, decretaron toques de queda. En Collier también se emitió una advertencia sobre el agua porque los funcionarios están evaluando los daños al sistema de suministros.
A unas 540.000 personas se les dijo que abandonaran la costa de Georgia, y el gobernador Nathan Deal declaró el estado de emergencia para todos los condados. Alabama, Carolina del Norte y Carolina del Sur también declararon estados de emergencia.
