Claudia López, fórmula vicepresidencial de Sergio Fajardo

La apuesta del candidato presidencial de la Coalición Colombia era previsible. Sin embargo, sectores afines a la alianza piden deponer los egos políticos para buscar compromisos mayores a favor del Acuerdo de Paz.

Desde el barrio Minuto de Dios, en el occidente de Bogotá, el candidato presidencial de la denominada Coalición Colombia, Sergio Fajardo, anunció lo que se hacía previsible desde que fue designado como el candidato único de la mencionada alianza: su fórmula vicepresidencial será la actual senadora de la Alianza Verde, Claudia López.

El exgobernador de Antioquia había dicho desde un inicio que la persona que lo acompañaría en la carrera política hacia la Casa de Nariño sería una mujer y, por ello, pese a que la designación de López se hacía la decisión más lógica, Fajardo escuchó varias propuestas, incluido el nombre de la exalcaldesa de Cartagena, Judith Pinedo.

Al final, resultó siendo la congresista la persona que se convertirá en su mano de derecha, en caso de que el número dos en las encuestas resulte ganando los comicios del 27 de mayo, sobre la cual dijo que “tenemos una mujer excepcional para un momento histórico que reclama personas excepcionales. Yo voy a ser el presidente de la reconciliación. Votos, compran. Líderes, compran, pero la confianza no la compra nadie. Les pedimos que confíen en nosotros”, dijo Fajardo.

A su turno, la senadora de la Alianza Verde dijo que desde el nuevo rol que ahora emprenderá de la mano de Fajardo, emprendiendo correrías por todo el país, seguirá enviando mensajes sobre la lucha contra la corrupción pues, desde su perspectiva, es el siguiente obstáculo por vencer, después de la guerra.

“Sé que tengo la pasión, el carácter. ¿Que tengo que cambiar el tono? Perfecto. Tenemos que cambiar. Es un honor ocupar este lugar que hoy me ofrece la coalición completa”, dijo López quien, agregó que la Coalición Colombia reúne la representación de lo que denominó las ‘tres Colombias’: la popular, la rural y la urbana.

El candidato a la Presidencia Sergio Fajardo Valderrama llegó a las 9:30 de la mañana del miércoles 28 de febrero a la casa de María del Carmen Hernández, en el barrio Minuto de Dios, de Bogotá. Fue a contarle que su hija, Claudia López Hernández, lo acompañará como fórmula a la vicepresidencia. “Bienvenido a su humilde morada, profesor”, le dijo María del Carmen y los invitó a pasar y sentarse en la sala de su casa.

Fajardo llegó con Jorge Enrique Robledo, la Coalición Colombia estaba completa. Desde la sala de María del Carmen, anunciamos que la actual senadora será la compañera de Fajardo en este sueño de transformar el país y la política.

“Tenemos a una mujer excepcional para un momento histórico que reclama personas excepcionales”. Con estas palabras, Fajardo presentó a esta mujer inteligente, valiente, corajuda y apasionada. “Una mujer con una energía infinita, preparada, que conoce al país. Una mujer que ha estudiado con todo el rigor lo que significa nuestra sociedad. Una mujer comprometida”.

Claudia nunca soltó el brazo de su mamá mientras escuchaba las palabras del candidato presidencial. “Estamos acá para construir un país con oportunidades para que cualquier persona, en cualquier parte del territorio, pueda avanzar a partir de su talento y de su capacidad. Así de sencillo, de profundo y de importante es el camino para construir una sociedad justa. Claudia López es un ejemplo extraordinario que representa eso”, expresó Fajardo.

Como vicepresidenta, Claudia tendrá una labor fundamental en la nueva Colombia que queremos: liderar la lucha anticorrupción.

“Se nos llenó la tasa. Lucharemos contra la corrupción como condición inicial para avanzar en la reconciliación. Tenemo que ser capaces de ser diferentes, de romper la polarización. Tenemos que ser capaces de convocar y unir, de reconocer la diversidad del país”, concluyó Fajardo.

Por su parte, Jorge Robledo destacó el trabajo en equipo y resaltó la importancia de esta decisión. “Es un triunfo de este proceso de la Coalición Colombia. Cuando dijimos que nos íbamos a unir, nos dieron durísimo: que los egos no nos iban a dejar. ¡Lo hicimos! Nosotros sólo hacemos lo que sea mejor para el país y eso es lo que encanan Sergio Fajardo y Claudia López”.

Emocionada, Claudia López tomó la palabra y no vaciló en expresar la enorme responsabilidad que asume y las ganas y pasión que tiene para liderar, junto a Fajardo, la transformación del país. “Nuestra obsesión por derrotar la corrupción, el clientelismo y a quienes abusan del poder público no es un capricho ni una moda. Después de la guerra y la violencia ese es el principal obstáculo que tienen las familias colombianas para salir adelante. Necesitamos que la educación pública funcione, que la salud pública funcione. Las familias colombianas necesitan que haya seguridad y justicia porque si los agreden, los violentan o los despojan, se pierde el esfuerzo de décadas”.

Claudia también habló de sus oportunidades y de cómo el amor de su familia influyó en la decisión de hacer política. Por eso habló de la tarea que tiene el nuevo gobierno:

“Nosotros somos el gobierno que va a lograr la reconciliación. No podemos pasar de la guerra armada, a la guerra de trincheras, del si o el no. De eso no come ninguna familia colombiana. La lucha de clases no le va a mejorar la educación a ninguna familia. Necesitamos emprendedores, pequeños y medianos empresarios que generen empleo, empleo de calidad y digno. Así vamos a poder tener niños amados y deseados, hombres y mujeres que pueden ingresar a una educación pública y de calidad. Ese país sólo es posible si unimos lo mejor de Colombia y eso es lo que representa esta coalición”.

¿Quién es Claudia López?

Yo soy un ejemplo de esos millones de colombianos que con amor, educación y disciplina salen adelante en la vida. Mi familia venía del campo, la materna de Cundinamarca y la paterna de Boyacá. Yo nací en Bogotá. Mi madre fue la primera mujer de su familia que accedió a educación superior: se formó como maestra en la Normal de Quetame, Cundinamarca y eso me cambió a mí la vida.

Hice mi primaria en una escuela pública en Engativa. Me gané por concurso el cupo a bachillerato en uno de los mejores colegios públicos de Bogotá, el Policarpa Salavarrieta en el centro de la ciudad. Desde los 10 años me crucé la ciudad sola y en buseta para llegar a mi colegio. Quería ser médico, pero no lo logré.

La vida me llevó por las ciencia sociales. Gracias a que me gané un crédito en el ICETEX pude estudiar en la Universidad Externado. Desde el día uno supe que tenía que ser la mejor para conseguir un buen trabajo o iba a quebrar a mi familia que no podía pagar ese crédito sin quitarle oportunidades a mis hermanos menores. Yo sé lo que es estar en un bus dos horas desde Ciudad Bolívar hasta el centro para ir ala Universidad y luego a trabajar, yo se lo que es deberle décadas a un banco para adquirir casa propia. Yo sé lo que es el mérito.

Me gané un crédito de Colfuturo para estudiar ingles, me gané la beca del BID y Colfuturo para hacer mi maestría en Administración Pública en Columbia University, me gané la beca Fulbright para hacer mi doctorado en ciencia política en Northwestern University. Para pasar la página de la violencia y construir la de la reconciliación, la igualdad y el desarrollo me lancé al Senado.

Fui la mayor votación del Verde

Los medios de comunicación supieron por primera vez de Claudia Nayibe López Hernández cuando ella tenía 20 años. Era una fogosa estudiante de finanzas, gobierno y relaciones internacionales en la Universidad Externado y participaba sin mucho protagonismo en el movimiento Séptima Papeleta, que impulsó, con un acto simbólico, la convocatoria a la Asamblea Constituyente de 1991.

Mujer, homosexual, polémica, elocuente y de posiciones férreas contra personajes del poder —las mismas características por las que muchos la atacarán y otros la defenderán; su punto débil y su fortaleza—, López tiene 47 años y los últimos cuatro los ha pasado en el Senado de la República, convirtiéndose en una de las parlamentarias más reconocidas por sus enfrentamientos con el expresidente y hoy también senador Álvaro Uribe, con legisladores de casi todas las bancadas y con más de un funcionario del Gobierno. Además, porque ha tomado las banderas de la lucha contra la corrupción con una consulta popular que recibió el apoyo de más de cuatro millones de colombianos.

Los 10 mandatos anticorrupción de Claudia López como vicepresidenta

“Nuestra obsesión por derrotar la corrupción, el clientelismo y a quienes abusan del poder público no es un capricho ni una moda. Después de la guerra y la violencia ese es el principal obstáculo que tienen las familias colombianas para salir adelante”, estas fueron las palabras de Claudia López en el anuncio de su designación como vicepresidenta.

Si algo ha distinguido a Claudia López en su actividad política es la lucha frontal contra la corrupción, no en vano lideró la recolección de más de 4 millones de firmas para convocar a una consulta popular anticorrupción.

Sin duda este esta ha sido un ancla del país por décadas para poder desarrollarse. En Colombia perdemos $50 billones en corrupción al año (6% del PIB). Esto equivale a todo el presupuesto, entre otros, del Ministerio de Educación, El ICBF, Ministerio de Agricultura, Ministerio de Ambiente, Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Ministerio de Trabajo y Colciencias.

Por eso el país ocupa el puesto 90 entre 176 países en el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional (donde el número 1 es el menos corrupto). Y esto es alarmante.

Cuando los corruptos y politiqueros suben al poder suelen cooptar la administración pública y evitan que las personas más calificadas se interesen en los cargos públicos. Personas en la administración pública responden a clientelas politiqueras y no al deseo de realizar una buena gestión pública.

Pero no sólo eso, aproximadamente el 15% de las personas vota a cambio de recursos económico, regalos o promesas de trabajo y este es sólo uno de los muchos datos productos de la corrupción:

Más del 75% de los colombianos no confía en los partidos políticos y solo 3 de cada 10 colombianos confían en la justicia. El 80% de los empresarios en Colombia considera que los sobornos son una práctica recurrente para hacer negocios en Colombia.

De acuerdo al informe del World Economic Forum (2017), Colombia se ubicó en el puesto 124/137 países en términos de confianza en los políticos, y de 131/137 en malversación de recursos.

Por eso Claudia López liderará desde la vicepresidencia, la lucha frontal  y efectiva, que el gobierno de la Coalición Colombia emprenderá contra la corrupción como principio fundamental de la transformación del país.

Estos son los 10 mandatos que propone Claudia:

Atacar la corrupción desde la ética

¡Ni un peso por un voto!

La cultura y la educación serán nuestras herramientas

Gobierno sin mermelada

Muchos ojos y pocas manos en la contratación estatal

Gobierno centrado en el ciudadano

El mérito será la regla no la excepción

El que la hace la paga

Ciudadanía y participación

Estado y funcionarios transparentes