Una constituyente es necesaria, porque hoy en día se puede hacer una constituyente limitada: Humberto de la Calle

Por Rubén Darío Mejía Sánchez

La rama judicial si francamente está muy fracasada, se nos llenó eso de corrupción hasta en las Cortes más altas y la verdad es que hay una serie de intereses mezclados, lo que llaman la puerta giratoria donde los magistrados y altos funcionarios nombran a otros familiares para su vez pasarle puestos a otros, con estas palabras el candidato a la presidencia por el partido liberal Humberto de la Calle Lombana analizaba el tema de la justicia que se encuentra en decadencia y cuenta con mal nombre ante la población nacional y aseguró que hay necesidad de hacer una constituyente, porque en estos momentos se podría hacer de manera limitada y considera que sería una posibilidad para reformar la justicia si los intereses que hoy existen lo impiden hacer, como ha ocurrido en varias oportunidades.

De la Calle Lombana no le pone mucho cuidado a los comentarios a su alrededor y mucho menos a los que critican y dicen que es el candidato del Gobierno y de un partido bastante dividido por dentro.

Dentro del plan de dar a conocer las opiniones de los diferentes aspirantes a la Presidencia de la República para el 2018-2022 presentamos en esta oportunidad los conceptos y programas de Humberto de la Calle Lombana, de quien decíamos anteriormente es el candidato del Partido Liberal, quien dialogó con la agencia de noticias Reporteros Asociados del Mundo:

Doctor buenos días.

Buenos días Rubén Darío, encantado de saludarle y de poder comunicarme por este medio con las personas que te siguen y están en sintonía.

Doctor cuéntenos cual es la base fundamental de su plan de gobierno.

Mi reflexión es la siguiente, se terminó el conflicto con el grupo guerrillero mas poderoso y eso hace que esto sea una oportunidad, no discutamos mas este acuerdo, eso de echar para atrás es realmente una locura, aquí lo que tenemos que hacer es que se generan oportunidades de una paz que realmente sea firme y esto no se consigue sino con política social, poniendo primero los pobres, yo francamente veo que hay enormes dificultades para los colombianos pero también una gran esperanza porque creo que es el momento de encaminarnos a resolver los problemas que estaban ahí agazapados y que no se han podido enfrentar por la persistencia del conflicto. Me parece que el centro de gravedad en una política social tiene que ser reconocer la enorme inequidad de la sociedad colombiana, esta es la sociedad mas inequitativa de Latinoamérica al lado de Haiti, una cosa verdaderamente vergonzosa y además la oportunidad de empezar a resolver temas de carácter concreto y eso significa pasar primero por un mayor desarrollo económico pero un desarrollo incluyente. Lo que ha pasado en muchos años de bonanza petrolera es que el país creció en su economía pero no distribuyó mejor su riqueza y hay elementos, primero educación que es el gran instrumento, la educación permite matar dos pájaros de un solo tiro, primero nos da mayor crecimiento, productividad, mayor capacidad de producción de la economía nacional pero al mismo tiempo es el instrumento que permite a los que se han ido quedando atrás poder realmente ingresar al mundo moderno y estar en una sociedad mas equitativa; y bueno, veo también con mucha preocupación los temas de salud, creo que el sistema de salud está fracasando y me parece que hay que desde el principio mirarlo e ir buscando condiciones de equidad para el usuario porque lo que se dice es que se tiene una enorme cobertura pero la gente llega a las salas de urgencia de los hospitales y no lo atienden, creo que esa es también una de las urgencias inmediatas.

En un viaje que hice de fin de año al Eje Cafetero, la gente estaba muy entusiasmada con su candidatura pero pensaban que el sector agrario estaba un poco olvidado ¿usted que va a hacer al respecto?

A mi me parece que la gran oportunidad justamente de tener un aparato productivo más abierto que no esté siempre ligado al petróleo es la reforma rural que es parte de los acuerdos. Es que en el país varios intentos de reforma agraria fracasaron, yo creo que ahí hubo una actitud muy miope de la clase dirigente colombiana. Ahora lo que estamos viendo es la oportunidad de dotar de tierra a los campesinos que no la tienen, por eso creamos el Fondo de Tierras de tres millones de hectáreas para entregarlas en doce años, pero también un proceso de formalización de las tierras y de acompañamiento de la economía campesina, al mismo tiempo me parece que hay muchas posibilidades en el tema de agroindustria, aquí estoy llegando a Boyacá y pienso que esta puede ser una gran despensa, moderna, tecnológica para producir alimentos y convertirse en un bastión de producción de alimentos para todo el mundo. Yo creo que en la agricultura tenemos unos retos enormes tanto en la economía campesina como en la agroindustria.

En el tema de la justicia ¿Cuál es su plan de gobierno?

La rama judicial si francamente está muy fracasada, se nos llenó eso de corrupción, ya corrupción hasta en las cortes mas altas y la verdad es que hay una especie de intereses mezclados, lo que llaman la puerta giratoria donde un magistrado o un alto funcionario le nombra a otro familiares para luego a su vez pasarle puestos a otro, yo creo que hay que hacer una reforma de fondo, desde la base y ahí me parece que llegaremos a romper todo ese compadrazgo que hay en la justicia y yo aseguro que si hay necesidad de hacer una constituyente pues la hacemos porque hoy en día se podría hacer una constituyente limitada y yo creo que esa sería una posibilidad para reformar la justicia si los intereses que hoy existen lo impiden hacer, como ha ocurrido varias veces.

El caballo de batalla en este momento de algunos candidatos contrincantes suyos en esta carrera por la Presidencia de la República es la impunidad ¿Usted que estuvo en los diálogos de paz que le puede decir al pueblo colombiano al respecto? 

Lo que se hizo no tiene antecedentes en el mundo, es la primera vez que no hay una amnistía general de impacto con una guerrilla que deja las armas, y al contrario una guerrilla que se somete a un sistema de jurisdicción transicional, osea la jurisdicción especial para la paz, pero esto implica que los colombianos reconozcamos que no solo es responsabilidad de los miembros de las FARC sino también de otros varios, esto es un popurrí de un conflicto muy largo con ocho millones de víctimas. Todos los responsables lo que tienen que hacer es contar la verdad y reparar a las victimas y si lo hacen, pues tienen penas distintas para facilitar la paz. Es una cosa curiosa, en todo el mundo aplauden esa solución y a todos los expertos, los entendidos, los organismos internacionales les parece que fue una decisión sabia y aquí yo comprendo que hay inconformidad pero no hay impunidad. Quienes resulten responsables, cuentan la verdad y reparan y tiene que pagar sanciones de 5 a 8 años, sanciones reparadoras. Pero ojo, el que no diga la verdad, tiene que pagar por los 20 años de cárcel ordinaria, luego ahí es todo lo contrario a la impunidad. Hay que recordar la capacidad que tiene el Estado para condenar a quienes no quieren hablar la verdad.

¿Cómo podemos calificar el llamado a Clara López como vicepresidenta?

Yo creo que esa es la gran coherencia de una fórmula que arranca del centro, en nuestra condición liberal, democrática y ella que siempre ha estado en las causas sociales, sin populismo con una hoja de vida limpia que trabaja por los desfavorecidos. Yo estoy realmente muy contento y me parece que estamos haciendo una suma de energías que sea bastante vigorosa y particularmente también un mensaje al partido liberal para que agite sus banderas y me refiero a todos los que tienen pensamiento liberal y no solo a quien se identifica con el Partido Liberal, al contrario lo que tenemos es que crecer, agrupar, sumar y esa fórmula lo permite.

¿Cuál va a ser su fórmula para poder conseguir que se vuelva a creer en los partidos políticos, en la justicia, en los planes de salud y de ayuda a los campesinos en Colombia?

Si, realmente ese es el gran reto, hay una desconfianza y una incredulidad muy grande. Lo que tenemos es que realmente unirnos, mostrar con hechos, el Partido Liberal tiene que corregir sus vicios, bueno, vicios hay en todos los partidos, por eso uno de los elementos es lograr una política mas limpia, a ver si venciendo esta incredulidad, tenemos un proyecto real de país para el futuro.

¿Usted es el candidato de quién, del Partido Liberal o tiene que ver algo el Gobierno?

No, el Gobierno no, esa es una discusión que inclusive es ajena totalmente a mí, yo estuve en La Habana en nombre de la sociedad colombiana, le agradezco a Santos que me haya permitido eso pero el Gobierno lo que tiene que hacer es dar garantías no meter la mano en las elecciones. Yo soy el candidato del Partido Liberal, pero mucho mas que eso, de personas que tienen pensamiento liberal, aun cuando hoy sean independientes o estén en las filas de otros partidos y ahora con la fórmula vicepresidencial lo que hacemos es un binomio que tiene un acento de política social, me parece que esa es la guía y hacía allá tenemos que marchar.

¿Cómo manejaría en el caso de llegar a la Presidencia de la República el problema de los que están en contra de la paz o de hacer arreglos a lo que se acordó en La Habana?

Yo creo que eso de hacer arreglos es realmente una locura, porque hablan de arreglos pero lo que en el fondo están diciendo en el fondo es desconocer la palabra del Estado, es que aquí hay un compromiso de todo el Estado Colombiano y que me parece es que primero hay que honrar la palabra y eso lo entiende fácilmente cualquiera, este no es un tema legal sino ético, uno no puede traicionar a unas personas que dejaron las armas y han ingresado a la política. Otra cosa es que el siete de agosto tengamos que abrir, abrir las manos y los brazos a todos los colombianos, no podemos continuar con esta polarización, sino estabilizar esta situación, cumplir los acuerdos y abrir una política que desde la perspectiva liberal pues implica discusión, la democracia se basa en eso, en discusión y controversia, pero no en el insulto, y pasar esta fase de polarización que le está complicando la vida a los colombianos que en vez de estar reflexionando lo que estamos es insultándonos, eso realmente está muy mal.

¿Cómo ve la economía colombiana en este momento?

Pues en una situación muy difícil, por muchas razones, entre otras por la crisis del petróleo y del carbón que es justamente lo que decía cuando señalaba que hay que buscar nuevas fronteras de producción, en particular ya hablé de la agricultura pero el turismo también tiene una enorme potencialidad; mientras la economía creció muy poco el turismo está creciendo, entre otras cosas porque hay zonas donde no se podía entrar, terminar este conflicto también es una oportunidad para el turismo y yo creo que ahí hay nuevas formas de un aparato económico productivo mucho compensado.

¿Volver o no volver a los diálogos con el ELN?

Todos estamos haciendo fuerza para que esto fructifique, pero francamente la indignación de los colombianos es enorme. El ELN tiene que entender que si no se toma en serio las conversaciones, si se acude a la discusión sobre el cese del fuego, tiene que hacerse con reglas muy claras, con garantías; lo que ha pasado no se puede repetir y mientras no tengamos garantías me parece que no se les deberían reanudar las conversaciones, solo yo diría como lo dice el Gobierno que se logre coherencia de parte del ELN, brindarle la seguridad a los colombianos de que no se va a seguir repitiendo estos actos terroristas.

El ciudadano de a pie en este momento está acorralado por los problemas de los robos en las ciudades y en los pueblos ¿Cómo entraría usted a trabajar eso con las autoridades?

Es que ahí si no podemos ser flexibles, hay que ser duro en esa materia. Lo que está pasando, mire usted la situación de Bogotá, en esta semana o en estos quince días hemos tenido una situación absolutamente insoportable, yo creo que hay mucho de impunidad producto de una situación que tenemos que corregir, la Policía coge al ladrón o retiene a la persona y lo sueltan los jueces porque los han cogido 50 o 60 veces pero no han sido condenados, entonces lo que tenemos que decir es, primero, el que cometa un delito armado no lo podemos soltar, ese hay que dejarlo en la cárcel; segundo, no basta con que sea condenado, a la persona que se le haya formulado seriamente cargos en varias ocasiones no se les pueden soltar porque lo que está pasando ahora es un círculo vicioso, y además de una respuesta dura, entre otras cosas haber terminado la confrontación con las FARC es la gran oportunidad de traer toda esa capacidad del Estado, de la fuerza pública, de la Policía para garantizar la seguridad de las poblaciones.

¿Se atreve a hablar de medio ambiente cuando las grandes potencias dejan este tema a un lado?

Yo creo que ahí hay una situación extraordinariamente compleja, lo que está pasando en todas partes es una especie de exacerbación del uso de la violencia, me parece que corresponde a una acción multilateral a fondo, yo creo que las decisiones unilaterales no son el mejor camino. Yo creo que hay que revigorizar mecanismos como las Naciones Unidas para superar una situación que está haciendo crisis en todos los lugares del planeta.

¿El medio ambiente como lo va a manejar?

Ese es un gran desafío, yo le digo que una vez transcurra esta confrontación y esta polarización nos tenemos que aplicar a examinar el modelo de desarrollo que proteja el ambiente. Lo que está pasando ahora es una minería legar desorbitada, estamos realmente acabando con nuestro entorno, con nuestra ecología. Por fortuna, los jóvenes están siendo cada vez más conscientes de esto, el cambio climático es una realidad luego hay que apoyar todos los procesos de adaptación de Colombia, que es un país vulnerable frente al cambio climático, por ejemplo, minería de metales  en las zonas de páramos o de selvas no se pueden permitir, hay que establecer claramente las zonas en donde tenemos que renunciar a la minería de metales y la minería legal tiene que dar garantías equilibradas y de respeto al medio ambiente, ese es un elemento fundamental.

¿Por qué hay que votar por Humberto de la Calle Lombana?

Porque yo tengo, primero, experiencia y sobre todo el espíritu para arreglar los grandes problemas nacionales, en la Constituyente también llegaron a decir que esto se iba al abismo y allí estuve yo como líder de la Constituyente, vocero del Gobierno para llegar a buen término e incluso es todavía un sueño que tenemos que cumplir, porque parte de lo que pasa es que lo acordamos en el año 91 aun no se ha convertido en realidad, luego en las conversaciones de paz porque dígase lo que se diga, se logró finiquitar ese proceso luego yo ofrezco experiencia, capacidad, claridad y también diálogo y paciencia, respeto por las ideas ajenas, decencia, yo no estoy en el plan de insultar ni nada a mis contendores.