El Jodario EL GENERAL BONNET
Por:Gustavo Álvarez Gardeazábal
Colombia es un país con memoria de gallina. Tal vez por ello se disculpa que a la hora de la muerte del general Manuel José Bonnet Locarno solo hubiesen notas mínimas que registraron su fallecimiento después de luchar un poco más de un año contra un cáncer, que él quería combatir. Pocos militares con tantos conocimientos humanísticos como él y creo que nadie como este militar del ejército que usaba su inmensa capacidad de lectura y sus amplios saberes en tantas áreas de la vida, para llevar a cabo su ejercicio como jefe de tropas.
Le tocó vivir momentos álgidos de la vida nacional y tomar determinaciones radicales y a veces impopulares en medio del conflicto que nunca quisieron llamar guerra, aunque duró 52 años. Usó las armas del Ejército de Colombia más para persuadir a los alzados en armas o a los grupos armados de narcotraficantes de la inutilidad de socavar al estado, que para disparar contra ellos. Como era lector asiduo de los clásicos griegos y usaba la teoría del arquetipo para comparar los personajes de las tragedias y comedias greco-romanas con la vida actual, daba cátedras sapientísimas para explicar sus a veces controvertidas actuaciones como comandante.
No olvidaré jamás cuando me convenció que el poder disuasorio de los tanques cascabel y de las tropas de la III Brigada marchando por las calles de Tuluá durante 15 dias seguidos a mañana y noche iban a alejar a los lavaperros de los narcos que se habían apoderado del pueblo que entonces yo gobernaba.Lo hicimos y el resultado permitió modificar sustancialmente el equilibrio del orden y la ley.
Ante su tumba no solo debieron aparecer los kepis de quienes le acompañaron su carrera militar,debería haber llevado yo un ejemplar de “Antígona” la tragedia griega que tanto estudió.
@eljodario
Publicada en Diario ADN, junio 22 2018