Egan y los pasos del blanco
Por Esteban Jaramillo Osorio
Bogotá, 28 de julio_ RAM_ Egan ganó porqué lidera su vida con optimismo. Por su persistencia, seriedad y sus convicciones profundas. Por su disciplina.
Porqué se ha forjado desde la cuna para ser campeón como ciclomontañista o como rutero. Porqué pedaleo mejor que todos con la osadía propia de su juventud.
Egan siempre ha entendido que los campeones se construyen desde el corazón, sin desfallecimientos ni resignación.
Sin vanidades, sin las fanfarronadas propias de algunos campeones, Egan asimila los elogios de los medios, que ensalzan con excesos o destruyen con descaro.
Pero no solo es él, también lo es su equipo. Lo son sus padres y los dirigentes que vieron en él su calidad de rutero, que lo formaron y lo apoyaron.
Egan es Nairo, es Rigo, es Cochise o Parra, Niño, Lucho, Rafael Acevedo, Botero, Peña, Rincón o “Patro” quienes abrieron y fortalecieron el camino. Es Miguel Ángel Bermúdez, Agustín Moreno, Jorge Ovidio González, dirigentes visionarios; es el Campeón Rueda, Piedrahita Pacheco, Arrastía Brica o Moncada Campuzano quienes con sus vibrantes relatos elevaron el fuego emocionado de la afición.
Es Martínez Prader, muerto de la peor manera, aplastado por un transmovil cuando recreaba una etapa con su estilo, desde una escotilla; es Rubén Darío Arcila, “el profe” Urrego, “la goga” Ruiz Sandoval o el argentino Sábato.
El Once Caldas. El zapato y el bombón
Foto Fernando Vallejo Vallejo
Salió de sus errores repetidos Bodhert y el equipo normalizó el juego. Un zapatazo de Guzmán, una delicia de Carreazo… Y Reina. El volante creativo se tragó la cancha y dominó el partido. Las veloces transiciones, de los juveniles Carbonero y García, liquidaron al Pasto, equipo batallador e inefectivo. Primer triunfo y un respiro. El portero mejoró; ¿Rodríguez hablaba por teléfono, quizás, en el gol del descuento? Colgado lo pillo la jugada.
Bodhert y su bombón. ¿Cábala? Lo cierto es que funcionó.
Esteban Jaramillo Osorio
Twitter: @estejaramillo