Brasil registra por primera vez un promedio de más de 3.000 muertes diarias en los últimos siete días
Agencia ANADOLU
Bogotá, 01 de abril _ RAM_ El Consejo Nacional de Secretarios de Salud de Brasil comunicó que durante el último día el país registró 3.769 fallecidos a causa del coronavirus.
Por primera vez el promedio diario de muertes en Brasil por COVID-19 superó las 3.000 al llegar a 3.117, posicionando los últimos siete días de marzo como la peor semana de la pandemia en el país.
De acuerdo con las cifras publicadas por el Consejo Nacional de Secretarios de Salud (Conass), este 1 de abril se registraron a nivel nacional 91.097 nuevos contagios y 3.769 fallecidos por el virus, para un acumulado de 325.284 decesos.
Si la cifra de óbitos diarios se mantiene por encima de los 3.000 en los próximos días, Brasil sumaría más de 330.000 muertes a causa del virus en menos de 48 horas y sobrepasaría los 350.000 en apenas una semana.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) está sumamente preocupada con la situación de Brasil”, dijo a los medios de comunicación brasileños Mariangela Simao, la subdirectora general del Departamento de Acceso a Medicamentos, Vacunas y Productos Farmacéuticos de la OMS.
“Brasil se encuentra en una situación muy grave, los hospitales están saturados, con la mayoría de las UCI llenas. Más de 6.000 personas están esperando cama en la UCI. Esta es una situación muy crítica. La variante brasileña afecta gravemente a los jóvenes, entre 21 y 30 años, que además están hospitalizados y en la UCI”, agregó Maria Van Kerkhove, jefe de enfermedades emergentes y zoonosis de la OMS.
El miércoles 31 de marzo el país suramericano rompió un nuevo récord de muertes por COVID-19, alcanzando la cifra diaria de 3.869 fallecimientos.
Frente a la situación, el recién posesionado ministro de Salud, Marcelo Queiroga, explicó en una rueda de prensa que “en estos días festivos no puede haber aglomeraciones innecesarias. Es importante llevar una máscara, mantener el aislamiento. Es importante hacerlo. No se desean medidas extremas, así que hagamos esto”.
Sin embargo, el presidente Jair Bolsonaro mostró su rechazo a esta medida: “No vamos a resolver este problema quedándonos en casa. Esta política [el distanciamiento] se sigue adoptando, pero el espíritu de la misma era prepararse con camas de UCI, respiradores, para que la gente no perdiera la vida por falta de atención. Ninguna nación puede sostenerse por mucho tiempo con este tipo de política y lo que realmente queremos es volver a la normalidad lo antes posible”, afirmó ante los medios.