Dos muertos, toques de queda y militarización en Colombia tras jornada de paro nacional

Manifestantes en la plaza de Bolívar

Agencia ANADOLU

Bogotá, 28 de abril _ RAM_A pesar de la masiva participación ciudadana en rechazo a la reforma tributaria que impulsa el Gobierno, el presidente Iván Duque calificó los actos de este miércoles como “vandalismo criminal”.

Dos personas muertas, toques de queda y disturbios en varias ciudades de Colombia son parte del saldo que deja la primera jornada del paro nacional convocado por sindicatos y movimientos sociales en rechazo a la reforma tributaria impulsada por el Gobierno de Iván Duque.

Los fallecidos se reportaron en las ciudades de Cali y Neiva, al suroccidente del país, en hechos que son investigados por las autoridades locales y la Policía.

En Cali fue derrumbada la estatua del conquistador español y fundador de la ciudad, Sebastián de Belalcázar, mientras que en Neiva tumbaron otra estatua del expresidente Misael Pastrana (1970-1975).

Además, hubo buses de transporte público quemados, enfrentamientos entre manifestantes y miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía (Esmad) y ataques a equipos médicos, vehículos privados y sedes de entidades oficiales.

El Ministerio de Defensa ordenó el despliegue de militares para apoyar el patrullaje de la Policía en Cali debido a la situación de orden público, motivo por el cual se decretó toque de queda desde las 3:00 p.m.

Y en Bogotá, la Alcaldía anunció el cierre del sistema de transporte público TransMilenio a las 5:00 p.m., por lo que cientos de ciudadanos tuvieron que volver a sus casas caminando, en bicicleta u otros medios improvisados y bajo la lluvia. Sin embargo, hacia las 7 p.m. el Gobierno bogotano anunció la habilitación de rutas especiales para transportar a las personas que intentaban regresar a sus hogares.

La alcaldesa Claudia López resaltó que en su mayoría la protesta en la capital fue pacífica, salvo los disturbios registrados en la Plaza de Bolívar. Fueron 56 puntos de protesta (23 al cierre del día). Por su parte, el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, notificó que la jornada deja 31 heridos (13 civiles y 18 policías), 15 detenidos, afectaciones buses y a 36 estaciones del sistema TransMilenio.

Gobierno Nacional se enfoca en desmanes

Durante su programa diario para hablar sobre la pandemia, y al reconocer que este miércoles 28 de abril es el día con más decesos por el coronavirus, el presidente Duque hizo énfasis en los actos de violencia registrados en varios lugares del país.

“Entendemos el derecho constitucional para la expresión pacífica de los ciudadanos, y vemos que la sociedad ha entendido los riesgos, pero también lo que hemos visto en muchos lugares es vandalismo criminal”, dijo el mandatario.

Duque agregó: “La violencia no nos va a resolver ninguno de los retos que tenemos que enfrentar como país”. Y continuó: “No puede ser la violencia el mecanismo de expresión, y mucho más, en medio de un tercer pico de la pandemia”.

Por otro lado, hizo un llamado a construir consensos “en el marco de la democracia”. Sin embargo, no hizo alusión directa al descontento social que motivó el paro nacional.

El presidente colombiano resaltó que las autoridades judiciales y de Policía “irán detrás de quienes han pretendido el día de hoy poner en riesgo la infraestructura, la vida, honra, derechos y libertades de los colombianos”.

Balance

Según datos de la Campaña Defender la Libertad (una red de organizaciones que denuncia detenciones arbitrarias, persecución judicial y criminalización de la protesta social en Colombia), con corte a las 4:20 p.m. se reportaban 14 allanamientos, 20 personas heridas y 24 detenidas.

La Policía reportó a su vez un total de 44 policías lesionados, 19 de ellos del Esmad.

Los manifestantes, así como varios sectores políticos insistieron en pedir el retiro de la reforma. Pero al mismo tiempo, exigieron la renuncia del ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.

Entre las frases más populares durante la jornada, está la siguiente: “Si el pueblo marcha en pandemia es porque el Gobierno es más peligroso que el virus”.