jueves noviembre 7 de 2024

Máximo comandante de la guerrilla colombiana del ELN renuncia por problemas de salud

El comandante del grupo guerrillero colombiano Ejército de Liberación Nacional (ELN), Nicolás Rodríguez, conocido como «Gabino», gesticula mientras habla en respuesta a las preguntas de Reuters en un campamento oculto en la selva, en esta imagen fija tomada de un vídeo sin fecha. 27 de agosto de 2012. REUTERS/ELN vía Reuters TV

Por Luis Jaime Acosta 

BOGOTÁ, 24 jun (Reuters) – El máximo comandante de la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional, Nicolás Rodríguez Bautista, renunció a su cargo por problemas de salud y en su reemplazo el grupo rebelde nombró a Antonio García, informó el jueves la organización insurgente.

Rodríguez, de 71 años, más conocido por su nombre de combatiente «Gabino», se encuentra en Cuba desde julio de 2018 en donde recibe tratamiento médico y a donde viajó con autorización del entonces presidente Juan Manuel Santos.

«Esta desafortunada circunstancia me impide desarrollar mis funciones como primer comandante del ELN, lo que me llevó a presentar la renuncia a dicho cargo la cual ha sido aceptada», dijo Rodríguez en un comunicado.

En otro comunicado el Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció que Antonio García, cuyo verdadero nombre es Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, de 65 años, remplazará a Rodríguez, mientras que Pablo Beltrán, jefe de una delegación que permanece en Cuba, será el segundo al mando y Pablo Marín, el tercero.

Antonio García, jefe de la delegación del Ejército de Liberación Nacional (ELN) para las conversaciones formales de paz con el gobierno colombiano, habla con medios de comunicación durante una conferencia de prensa en Caracas. 30 de marzo de 2016. REUTERS/Marco Bello

El ELN, conformado por unos 2.500 combatientes y al que Estados Unidos y la Unión Europea consideran una organización terrorista, surgió en 1964 inspirado en la revolución cubana con el apoyo de sacerdotes católicos radicales.

El grupo rebelde, acusado de financiarse del secuestro, la extorsión, el narcotráfico y la minería ilegal, ha fracasado en la búsqueda de un acuerdo de paz para acabar con una confrontación que ha dejado 260.000 muertos, debido a sus posiciones radicales, una cadena de mando difusa y disenso en sus filas.

En enero de 2019, un carro bomba explotó al interior de la Escuela de Cadetes de la Policía Nacional en Bogotá, en un ataque de la guerrilla del ELN que dejó 22 muertos y que frustró las posibilidades de un diálogo de paz del Gobierno del presidente Iván Duque y ese grupo rebelde.

Algunos de los líderes de esa guerrilla, como Pablo Beltrán, permanecen en Cuba pese a que el Gobierno de Bogotá ha pedido en varias ocasiones a La Habana su extradición para que respondan ante la justicia colombiana.

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