Daniel Martínez sigue cuarto tras la sexta etapa de la París-Niza, Roglic sigue líder
Aubagne,11 mar (EFE).- En un final agónico y de máxima incertidumbre, el francés Mathieu Burgaudeau (TotalEnergies) logró salvar una postrera escapada por escasos centímetros para imponerse ante el pelotón en la sexta etapa de la París-Niza disputada entre Courthézon y Aubagne, de 213.6 km, jornada que mantuvo a Primoz Roglic (Jumbo Visma) con el maillot amarillo de líder.
El colombiano Daniel Martínez continúa como el mejor colombiano de la general a 56″; mientras que Nairo Quintana es noveno a 1’45».
Apuesta valiente y ambiciosa de Burgaudeau, un modesto corredor nacido hace 23 años en la Isla de Noirmoutier, que le condujo a su primera victoria profesional. Un premio merecido, eso si, con toda la incertidumbre del mundo, pues su escapada en los últimos 8 km estuvo a punto de irse al traste en los últimos metros por la voracidad de un pelotón desmelenado.
Los velocistas llegaron tarde. Burgaudeau logró la hazaña por lo pelos, con un tiempo de 5h.33.06, a una media de 38,5 km/hora. Mismo tiempo que el pelotón principal, encabezado por el danés Mads Pedersen (Trek Segafredo) y del belga Wout Van Aert (Jumbo Visma). En el grupo de cabeza entró, séptimo, el español Iván García Cortina (Movistar).
Hasta el último tramo de etapa sobrevivió una fuga inicial de 6 corredores que incluía al suizo del Movistar Johan Jacobs. Juntos coronaron el primero de los 6 puertos del menú, el Col de Murs ( 2ª, 10,3 km al 4,2 %) con el pelotón a 4.45 minutos transitando con tranquilidad, sin ataque alguno.
Tres puertos después, y con poco mas de 1 minuto de ventaja, la avanzadilla llegó al punto clave del día, el Col de l’Espigoulier (2ª,11 km al 4,4 por ciento). A pie de puerto llegaron con unos segundos Jabobs el francés Korecky y el británico Holmes. Escapada sentenciada ante un pelotón controlado por el Jumbo y por el Trek, que buscó la victoria todo el día.
Los escapados coronaron el paso de montaña a la vez que fueron cazados por el gran grupo. Restaba un descenso de 27 km hasta meta, una etapa nueva, pero más corta y emocionante.
De ello se encargó el danés Soren Kragh Andersen (DSM) con un ataque a tumba abierta en el descenso que cortó el pelotón en mil sectores. El nórdico fue cazado a 15 de Aubagne, pero siguió la fiesta. Esta vez el francés Mathieu Burgaudeu, atacando con más ilusión que posibilidades de éxito en la última cota no puntuable. Pero a veces los modestos también abrazan la gloria.
El ciclista galo abrió una brecha de 18 segundos, y soltó el órdago. Por detrás el Trek dejó de tirar en su búsqueda y el Jumbo tampoco se volvió loco con sus intereses a buen recaudo. No obstante, Christophe Laporte atacó en el grupo perseguidor a 2,5 de la línea. Peligraba el sueño de Burgadeau, quien pasó por el banderín rojo de últimos 1.000 metros con 10 segunditos de renta.
No quedaba otra que apretar los dientes y dejarse el alma, Eso fue lo que hizo el francés. La marabunta se le echaba encima, lo iban a devorar, pero de repente concretó su sueño ganador. Por centímetros, pero se llevó un justo premio. Por valiente y ambicioso.
En la general, sin cambios en vísperas de la etapa reina con la cima del Turini como meta. Roglic defenderá el maillot amarillo con 39 segundos de ventaja sobre Simon Yates (BikeExchange) y 41 respecto al francés Pierre Latour (TotalEnergies), sus inmediatos rivales. Ion Izagirre afrontará la jornada décimo a 2.01 minutos.
Este sábado etapa reina entre Niza y el Col de Turini, de 155.2 km, un final en alto decisivo con ascenso hasta meta tras 15.2 km al 7,2 por ciento de pendiente media. EFE