Bogotá sí o sí tendrá Metro en 2028: Claudia López
Bogotá, 25 enero de 2023_RAM_El Metro de Bogotá estará listo en el 2028, señaló la alcaldesa mayor, Claudia López, antes de la reunión que tenía prevista con el presidente Gustavo Petro para entregarle las observaciones del concesionario constructor chino a la solicitud del primer mandatario de estudiar la posibilidad de subterranizar un tramo del proyecto.
Esta reunión estaba prevista para hacerse el lunes pasado, pero debió ser aplazada por motivos de la agenda del presidente.
Al cierre de esta edición se esperaban resultados de esta reunión y además conocer las observaciones del concesionario Metro Línea 1 (ML1) sobre la posibilidad de que el diseño del metro elevado sea modificado, para que sea subterráneo en el tramo por la avenida Caracas hacia el norte.
Sin embargo, todo indica que la alcaldesa le diría al presidente Petro que no está de acuerdo con modificar el proyecto porque ello implicaría que la obra se entregue después de 2010.
La alcaldesa López dijo a Blu Radio, antes de entrevistarse con el jefe de Estado en la Casa de Nariño, que “esto es un contrato con 18 % de ejecución y 4.200 trabajadores haciéndolo. Bogotá va a tener metro en el 2028, sí o sí. Porque por andar saboteando, parando y retrasando es que estamos tan trancados como estamos”.
Añadió López que “en la primera línea del Metro están trabajando hoy 4.200 colombianos, construyendo el patio taller en Bosa, terminando los estudios y diseños, construyendo el viaducto en la 72 con Caracas”.
Explicó la mandataria distrital que «el presidente le pidió al consorcio que está construyendo la primera línea del Metro desde el año pasado, como ustedes saben, que analizara la viabilidad jurídica, técnica y financiera de una eventual subterranización de un tramo… se lo vamos a presentar”.
La posibilidad de que sea subterranizado un tramo del esperado, por más de 50 años, Metro en Bogotá, ha levantado una polémica porque implicaría más tiempo en su construcción y mayores costos.
El proyecto del Metro fue aprobado durante la alcaldía de Gustavo Petro para hacerse subterráneo hasta la calle 127. El entonces presidente Santos se comprometió a que la Nación aportaría $13,7 billones, correspondientes al 70 % del valor de la primera línea.
Sin embargo, el siguiente alcalde, Enrique Peñalosa, optó porque era más conveniente por tiempo de construcción y costos hacer el metro elevado, aunque se acortó la línea hasta la calle 72. Así quedó en el contrato con el consorcio chino que alcanzó a firmar en su mandato. Ello fue secundado por el entonces presidente Iván Duque para la entrega de los recursos de la Nación.
La alcaldesa López recibió el proyecto con estas especificaciones, el cual inició su construcción el año anterior con el patio taller en Bosa, la compra de predios, así como la reubicación de las redes de servicios públicos.
El presidente Petro revivió la idea de que al menos una parte de la primera línea del Metro sea subterránea. Incluso como candidato anunció que insistiría en ello si llegaba a la Casa de Nariño.
En ese sentido se podría decir que subterranizar, aunque sea una parte del Metro de Bogotá, es una promesa de campaña de Gustavo Petro.
En noviembre pasado el ya presidente dijo que “en el año 2015, el metro subterráneo de Bogotá, hasta la calle 127, costaba 14 billones de pesos. Hoy ese mismo tramo cuesta 35 billones de pesos. Ese es el costo de la mezquindad política”.
Luego Petro, en una reunión con la alcaldesa López, planteó preguntarle al constructor la posibilidad de hacer subterráneo un tramo de la obra.
López explicó, tras la reunión, en esa oportunidad con el jefe de Estado, que “al presidente Petro le preocupa el impacto urbanístico, el impacto ambiental y el impacto patrimonial porque pasaría por todo el centro histórico de Colombia, y por eso ha pedido que se evalúe esa posibilidad, pero es una evaluación”.
Al respecto en esa ocasión dijo el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, que “queremos dejar claro que por parte del presidente de la República jamás ha habido una imposición, solo que como financiador del 70 % del Metro hay que hacer revisiones. No se están cambiando las reglas ni desconociendo contratos”.
No habría cambios
En las últimas horas se reunió una comisión accidental de congresistas y concejales de Bogotá para analizar los avances en la construcción del Metro. La principal conclusión es que el proyecto que está en marcha no debe sufrir variaciones para evitar más retrasos en la obra y perjuicios a la ciudad.
El gerente general de la Empresa Metro de Bogotá, Leónidas Narváez, fue claro en señalar que “no da lugar a que evaluemos riesgos jurídicos, porque la realidad es que hay un contrato firmado que se está ejecutando, que tiene recursos, que tiene vinculación de la banca multilateral y que estamos dentro de las actividades del proyecto como estaba previsto”.
Por su parte, el senador Miguel Uribe, del Centro Democrático, expresó que «hay una limitante jurídica de la ley que establece que a un contrato no se le puede adicionar más de un 50 %, y eso implica que un cambio como este exceda esa limitante legal. Es decir, que todo indica que no debe ni puede modificarse el proyecto».
Dicha comisión previno en un comunicado, que «si la modificación del cambio de estructura constructiva del metro genera al contratista mayores utilidades frente al modelo de negocios actual y le produce un beneficio especial en favor suyo, su concepto se vería afectado por el rompimiento de la imparcialidad e independencia para atender su propia conveniencia”.
Obras este año
El compromiso del concesionario con la Empresa Metro de Bogotá (EMB) es que antes de finalizar el primer semestre del próximo año se tengan tres frentes activos para el desarrollo de esta gran estructura.
Lo anterior se ratificó con la suscripción, el pasado 26 de diciembre, del modificatorio 7 al contrato de concesión 163 de 2019, en el que la Empresa Metro de Bogotá (EMB) y Metro Línea 1 S.A.S. evaluaron el avance de los estudios y diseños de detalle principales, el estado de la consecución de las licencias y permisos de construcción de obra por el concesionario y la entrega de la totalidad de los predios por parte de la EMB a ML1.
“Los estudios y diseños principales se encuentran en proceso de obtención de la no objeción de la interventoría, lo cual requiere que el concesionario resuelva las observaciones formuladas por esta, considerando que el 30 de marzo de 2023 es la fecha idónea para que las partes concluyan la totalidad de la revisión sin afectar los frentes de obra que avanzarán desde el 8 de enero del próximo año”, indicó la Alcaldía.
Agregó que “con esto, se garantiza la terminación de la fase de construcción de la Primera Línea del Metro de Bogotá, que se definió para el 14 de septiembre del año 2027”.
“En todo caso las actividades de obra que inician antes del 30 de marzo de 2023 contarán con los respectivos estudios y diseños debidamente no objetados por la interventoría”, aclaró el gerente general de la Empresa Metro de Bogotá.