El Cable vuelve al Cable
Manizales, 13 marzo 2023_RAM_Hace más de un siglo, en enero de 1922, se inauguró la primera estación de un cable aéreo en Manizales, justo en el sector de El Cable donde está hoy ubicada la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional. 101 años después habrá una nueva estación en el sector, la nueva Línea 3 del Cable. Los componentes que serán instalados en el proyecto, ya están siendo construidos en Europa y ya no tendrán que cruzar el Atlántico, ni recorrer media Colombia por el río Magdalena, ni llegar a la ciudad a lomo de mula o buey, como hace un siglo.
La historia de Manizales en los últimos cien años está directamente ligada al cable aéreo, un medio de transporte a través del cual se abastecía la ciudad y que llegó para ahorrar travesías de más de diez días de camino y que, tras un breve paréntesis, pasó a convertirse en medio fundamental de transporte para la capital caldense.
Se desarrollaba la Primera Guerra Mundial y la obra apenas comenzaba. Lo que demoró seis años más de lo previsto permitió en ese momento contar con el teleférico más largo del mundo y uno de los primeros de Latinoamérica, con una longitud de 72 kilómetros, que unió a las poblaciones de Mariquita, en el Tolima, y Manizales, Caldas.
La compañía inglesa The Ropeway Extensión, encargada de su construcción por concesión del Estado Colombiano, comenzó trabajos en 1914, en medio de las dificultades que implicaba traer materiales desde Inglaterra en pleno desarrollo de la confrontación bélica centrada en Europa. Después de atravesar el Atlántico y recorrer medio país por el río Magdalena, la maquinaria, herramientas, insumos y provisiones para la obra eran despachados desde Honda, Tolima, a lomo de mula o de buey hasta las escarpadas montañas de la zona.
En marzo de 1914 se inauguró el primer tramo entre Mariquita y Soledad (hoy Herveo) en el Tolima, pero la guerra obligó a la suspensión casi total de la obra hasta 1916. El 22 de enero de 1922, seis años después, concluyó con la inauguración de la Estación de La Camelia, en Manizales (hoy sede de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional).
Por más de cuarenta años, este sistema de transporte de 71.823 metros de longitud, compuesto por 375 torres de acero que unían 22 estaciones construidas en madera, fue el motor del desarrollo de la economía en una región que a comienzos del siglo XX estaba aislada del resto del país y el mundo, pero que logró a través del teleférico abastacerse y sacar su producto estrella, el café, a los mercados nacionales e internacionales. Un millón y medio de toneladas de carga transportadas así lo ratifican, pero con la llegada del ferrocarril a la capital de Caldas y el auge de las carreteras, el cable aéreo Mariquita -Manizales cumplió su ciclo en 1967, año en que fue cerrado.
Pero su éxito impulsó a la creación de sistemas similares en la década de los 20 como el cable aéreo Manizales – Aránzazu, que operó desde 1928 a 1942, y transportó 1.1 millones de pasajeros y 200 mil toneladas de carga. Una vasta zona de influencia se favoreció con este medio de transporte, pues impactó a otros centros urbanos como Salamina, Pácora y Aguadas, desplazando incluso a la arriería. También avanzó primariamente un proyecto para conectar con el Océano Pacífico que avanzó solo 10 kilómetros entre Manizales y la Estación de Malabrigo y operó desde 1929 hasta 1935 con servicio de carga y pasajeros.
También hay antecedentes de teleférico a Villamaría, que, consumida por un incendio en 1925, encontró en el sistema una forma de transportar piedra y arena para su reconstrucción. Tenía una extensión de dos kilómetros y una capacidad de carga de 40 toneladas.
El nuevo milenio
A partir de las experiencias en cables aéreos que facilitó la actividad económica de la ciudad el siglo XX, Manizales comprendió que estos sistemas de transporte son una alternativa idónea para sobrepasar de una manera eficiente las barreras topográficas y urbanísticas, al adecuarse a la morfología urbana y natural como ningún otro modo de transporte público lo podría hacer, brindando una serie de beneficios al no ser agresivo en su implantación, en la reducción de contaminación ambiental, menor tiempo en los desplazamientos, confort, mayor seguridad e inclusión para los diferentes usuarios.
Es así como en el año 2009 la ciudad puso en operación comercial la Etapa I de Cable Aéreo (tramo Fundadores – Betania –Cámbulos), la cual tiene una longitud de 1,9 kilómetros.
Dentro de este proceso, en el año 2014, se puso en operación comercial la Etapa II de Cable Aéreo (tramo Cámbulos – Villamaría), la cual tiene una longitud de 0,8 kilómetros.
Están dos líneas permitieron conectar el Centro Histórico y Administrativo de Manizales con la plaza principal del municipio vecino de Villamaría, lo cual permite que estas dos centralidades se unan en un tiempo de desplazamiento de 12 minutos, de una forma segura, limpia y sostenible.
Visión de ciudad
En la construcción del Plan Maestro de Movilidad de Manizales se propuso como visión que al 2032 la ciudad contara con una movilidad incluyente y segura, teniendo los cables aéreos como uno de los sistemas principales que deben ser desarrollados a corto plazo.
Dentro de esta planeación de ciudad se identificó que la siguiente línea de cable a ejecutar corresponde a la Línea III, que conectará los sectores de Cámbulos – Fátima – Universidades – Avenida Santander, integrándose a las dos líneas ya existentes, mejorando la movilidad en el sentido norte – sur y conectado las tres principales centralidades (Centro Histórico Manizales, Plaza Principal Villamaría, Centro Financiero – Universitario – Deportivo).
Para viabilizar este proyecto se han elaborado tres estudios específicos para el análisis de la Línea III Cámbulos – ElCable. El primero realizado en el año 2017 por la firma Steer Davies Gleave, en el marco del Plan Maestro de Movilidad, en el que se elabora un estudio de pre-factibilidad para esta línea. El segundo, elaborado en el año 2018, por la firma ISTCables, en el que se realiza un estudio de factibilidad para este proyecto. Finalmente, el tercero en el año 2021, en el que se desarrolla una actualización y complemento a los estudios de factibilidad por parte de la firma ISTCables.
Un proyecto de movilidad sostenible y limpia que ahorrará al medio ambiente más de 780 toneladas de CO₂ al año, y que espera movilizar más de 12 mil personas al día, mejorando la calidad de vida de manizaleños, villamarianos y visitantes de municipios aledaños que día a día viajan de sus hogares hasta la Terminal de Transporte de Manizales.
Para poder concretar el proyecto de la Línea 3 de Cable Aéreo, el municipio de Manizales e Infimanizales vienen aunando esfuerzos para lograr su desarrollo. Es así como en este momento desde el otro lado del mundo, en Italia, la firma Leitner produce los componentes electromecánicos que movilizarán a miles de personas, mientras en Colombia, la Unión Temporal L3, conformada además por Ingecables y los ingenieros Ricaurte Valencia y Diego Tamayo, culminan estudios de estructuras, geotecnia, topografía, arquitectura y redes, que permitirán iniciar obras para la ubicación de dichos componentes.
Frente al tema, el gerente de InfiManizales, Alejandro Arango, aseguró que “estamos ante una gran apuesta de ciudad que permitirá ampliar su red de cables y traerá muchos beneficios para los ciudadanos”.
Arango dijo que la nueva línea facilitará “la prospectiva de tener una gran red de cables aéreos, algo que viene pasando y consolidándose en ciudades de Latinoamérica y por tanto Manizales no puede ser la excepción”. También agregó que “la ciudad es idónea para este tipo de mecanismos de movilidad, que en el futuro se unirá al Sistema Integrado de Transporte Público, que incluye buses y bicicletas”.
Así operará la nueva línea
La construcción y puesta en funcionamiento de la Línea III favorecerá la gente de las comunas Palogrande y Universitaria, compuestas por los barrios Las Colinas, Pio XII, Camilo Torres, Kennedy, Fátima, Betania, Palermo, Guayacanes, Palogrande y Laureles. También a los habitantes del municipio de Villamaría y a los que visitan la ciudad y llegan por la Terminal de Transportes.
La Línea 3 del Cable Aéreo se compone de un tramo de 2,4 kilómetros en su recorrido en el sentido norte – sur,conectando la vía Panamericana, a la altura de la Terminal de Transporte, con el sector de El Cable.
El recorrido entre Cámbulos y El Cable será de 12 minutos, lo que hoy normalmente se hace por tierra entre 25 y 30minutos. Tiempos similares se estarían reduciendo en las otras tres estaciones y el centro de la ciudad (Fátima – Universidad – El Cable).
De esta manera se integran el Centro de la Ciudad, donde se encuentra el Centro Histórico y funcionan el gobierno municipal y departamental, el comercio tradicional, la justicia y las entidades del orden territorial; el sector de El Cable, de gran importancia por su movimiento económico y su confluencia de ciudadanos de todas las edades, por ser un centro financiero, comercial, turístico y recreativo, importante zona de bares y restaurantes, con infraestructurauniversitaria, deportiva y de salud; y la Terminal de Transporte en el sector de Cámbulos, donde confluyen los pasajeros que llegan y salen de la ciudad en transporte público.
La nueva línea proyectada del Cable Aéreo de Manizales contará con las siguientes cuatro estaciones:
Cámbulos: Corresponde a la estación motriz del sistema, la cual se ubicará sobre la vía Panamericana, en la plazoleta que se encuentra entre las edificaciones de la Terminal de Transporte y el edificio de la actual Estación Cámbulos. Aquí se encontrará con las líneas 1 y 2 que conforman actualmente el sistema.
Fátima: Será una estación intermedia, la cual facilita el ascenso y descenso de usuarios, que estará en un área de espacio público y de actividad residencial, comercial e institucional, contigua a la Iglesia de Fátima.
Universidad: Será también una estación intermedia que permitirá el ascenso y descenso de pasajeros y también el cambio de alineamiento del sistema. La edificación estará implantada entre predios de la Universidad de Caldas y la Universidad Nacional, contigua al Parque de la Gotera y próxima al Complejo Deportivo Palogrande.
El Cable: Será estación de ascenso y descenso de pasajeros y de retorno y tensión del sistema. Tendrá la elevación suficiente para que las cabinas puedan sobrevolar la avenida Santander con la altura de seguridad adecuada.