Proyectos sin pupitrazo
Jorge Giraldo Acevedo
Lo que ocurre en las labores del poder legislativo y el actual Gobierno, ya aprobada la reforma tributaria por el Congreso, es que aún siguen pendientes urgentes sobre cuestiones agrarias, salud, régimen de pensiones y medidas para frenar el alza de los alimentos y servicios públicos.
También está pendiente legislar en torno a los urgentes cambios que requiere la justicia, medidas para evitar la inmortalidad en la administración pública y lo concerniente al conflicto en las cárceles del país por la congestión.
Estas y otras gestiones las debe tramitar el Congreso con calma, seriedad, responsabilidad y teniendo en cuenta los planteamientos de todos los gremios de la economía y el trabajo; nunca se deben aprobar proyectos a pupitrazo o a la ligera.
Otra petición ciudadana es que el trámite de proyectos, mediante la calificación de urgentes o prioritarios, se debe hacer con suma responsabilidad y con base en lo que establece la Constitución Política de Colombia.
Es el Gobierno y el poder legislativo los que tienen la oportunidad de establecer las bases para un pleno desarrollo nacional con miras a disminuir las desigualdades económicas y sociales del país.
Si la administración de Gustavo Petro y el Congreso logran la aprobación de las leyes sobre la mayoría de las cuestiones urgentes harían honor a la frase célebre y rotunda del famoso periodista y escritor francés Albert Camus en el sentido que «la dura y maravillosa tarea de este siglo, es la de edificar la justicia en el más injusto de los mundos».
Fusagasugá, Cundinamarca