El Ojo del Halkón Respeto Señores
Por Rubén Darío Mejía Sánchez
Hace muchos años estuve estudiando el bachillerato y entre las cosas que me enseñaron fueron los tres poderes del Estado y el profesor Luis Eduardo Suárez nos repetía que esos tres poderes eran demasiado importantes para el funcionamiento del país, pero que eran totalmente independientes y debían de respetarse los unos a los otros en las decisiones que tomara; mi profesor hablaba de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial.
Ese asunto tan elemental parece que se le ha olvidado a algunos funcionarios del país, representantes de esos poderes y es cuando vemos al Presidente de la República cazando peleas con el Fiscal General de la Nación que ni corto ni perezoso no ha querido respetar las actuaciones del Gobierno, sino que las ha controvertido y no hablo de respeto directamente sino por enfrentamientos sobre quien tiene la razón con una cosa y con la otra. Sabemos que en la rama judicial se están presentando muchos problemas en este momento en Colombia, porque parece que la ley no está muy bien hecha y es cuando vemos que los delincuentes de todos los rangos, de cuello blanco y común y corriente están saliendo de las cárceles simplemente porque no hay motivo para mantenerlos en ellas o simplemente porque la ley en Colombia sigue siendo para los de ruana y los fallos de los jueces han sido erróneos en gran número como lo podemos ver en los últimos años.
Las ciudades están acorraladas por la delincuencia, el país está acorralado por la delincuencia, el narcotráfico y otras formas de violencia, pero a los culpables se les detiene y se les deja libres o se les premia con casa por cárcel.
Todo lo anterior ha llevado a que el ciudadano común y corriente no denuncie, simple y llanamente porque no cree en la justicia del país y por eso es necesaria una reforma y es necesario que el señor Fiscal General de la Nación tenga prudencia cuando contesta al Presidente de la República como el Jefe del Estado y el Jefe del Estado debe también tener respeto para con el Jefe del ente fiscal, quien tiene la obligación de mantener el cumplimiento la justicia.
Bochornoso lo que pasó este fin de semana, enfrentamiento como se dijera en la escuela o en el colegio de dos gallos de pelea, uno que casa peleas por nada y el otro que se le ha dado últimamente por demostrar que también tiene poder y se le debe respetar para que cuando haga lo que quiera, nadie lo controvierta en lo que está diciendo y eso es una situación supremamente grave.
Tanto el presidente Gustavo Petro como el fiscal general de la nación, Francisco Barbosa deben de ponerse en su puesto y recordar algo: el respeto se gana; pero como van las cosas ninguno de los dos está ganando el respeto y están quedando muy mal al frente del país. Aquí se está cumpliendo lo que se dijo en una oportunidad, que no se podían politizar los poderes del Estado, que no se podía politizar la justicia y que no se podía politizar cada una de las actuaciones del Presidente, porque muchas veces y uno desprevenido puede darse cuenta que, parece que los dos estuvieran en campaña política y no sabemos por qué. Si es verdad que Colombia está en campaña política regional para este año, pero creemos que tanto el Jefe del Estado como el Jefe del ente acusador deben de estar marginados de ésta para que no pierdan credibilidad.
El asunto ya trascendió mucho, hay demandas por parte de un fiscal, el Fiscal General de la Nación anuncia que sacará a su familia del país porque corre peligro en su seguridad y el presidente Petro se sostiene en decir que él es el jefe del Estado y por tanto puede hacer y exigir lo que está exigiendo.
Sí puede pedir que se le den informes de lo que está pasando en la justicia, pero para ello hay canales que deben de utilizarse para no pisarse los callos los unos a los otros y evitar la situación que estamos viviendo en este momento en el país.
Ahora el presidente Petro, horas antes de escribir esta columna, dijo que estaba de acuerdo con el pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia en decir que el Jefe del Estado estaba dando una interpretación errada al artículo 115 de la Constitución cuando en medio de sus diferencias con el Fiscal General de la Nación, manifestó que, en su calidad de Jefe de Estado, coordina las tres ramas del poder público y es jefe administrativo de Francisco Barbosa. La Corte le recordó al presidente Petro que la autonomía e independencia son cláusula fundamental de la democracia.
Petro muestra su interés después de varias horas de reunirse con la Corte y aclarar la situación, respuesta que no se ha tenido hasta ahora y mucho menos el pronunciamiento del fiscal Francisco Barbosa.
Señores, no hay que echarle más leña al fuego, Colombia está totalmente polarizada, muchos están huérfanos de poder y tratan de demostrar las fallas que ha cometido el Gobierno y que debe corregir cuanto antes, pero lo que han hecho es enfrentarse como perros furiosos y no como gente civilizada, olvidando que la política es para servir y no para ser servido, pero aquí se han sentido todos como reyes absolutos sin respetar las opiniones y posiciones de los demás. Esperamos que sean sensatos tanto el Jefe del Estado como el Jefe del ente acusador y que no le eche más fuego a una guerra de palabras que va a afectar demasiado al país, que está saliendo de unos momentos muy difíciles y donde necesitan aprobación de reformas esenciales como son las de la salud, laboral y de justicia.
Esperemos que no nos pase lo del ciego qué dijo “amanecerá y veremos” y nunca vio.