SOS agua SOS
Por Mauricio Salgado
Roger terminó el café y el muffin en Goodlife Café and Bakery, el mejor sitio de Mendocino, una de las ciudades tradicionalmente preferidas por los turistas durante el verano en California. Se levantó y, para su sorpresa, el letrero en la puerta del baño indicaba que los servicios estaban afuera en dos cabinas plásticas pintadas de verde tratando de disimularlas. Estas cabinas estaban ubicadas en plena vía principal y eran baños químicos, una medida que todos los restaurantes habían tenido que adoptar; hacía meses que las fuentes de agua para la ciudad se habían secado, a pesar de encontrarse en la entrada del parque natural de Mendocino, a tres horas y media de San Francisco.
Desde la amplia ventana de su casa en Atenas, Cristel miró con tristeza el terreno reseco y calcinado por el sol, donde antes había pasto verde. La falta de agua, sumada a las altas temperaturas, había llevado a las autoridades a prohibir el riego del pasto, situación similar a la que se vivía en la ciudad de Las Vegas en Estados Unidos, donde los jardines habían sido cubiertos con pequeñas piedras de colores debido a la escasez de agua. Simplemente, no había suficiente agua disponible.
En la ranchería de Uribia, en La Guajira colombiana, Anahí revisaba las «latas» de agua; cada vez era más difícil encontrarla. La escasez de agua se había convertido en la mayor preocupación de más de 400 familias durante el último año, ya que el recurso se volvía cada vez más escaso.
El cambio climático es el gran desafío que enfrenta toda la humanidad, no hace distinciones entre razas, credos, ideologías o países, sin duda, algunos sufrirán más que otros, como los habitantes de las islas que literalmente desaparecen debido al aumento del nivel del mar por el deshielo de los polos. Pero también hemos presenciado cómo los residentes de mansiones han perdido sus hogares debido a los incendios en California, Estados Unidos, y en la capital de Grecia, Atenas.
A medida que las temperaturas globales aumentan y los patrones climáticos cambian, se vuelve esencial encontrar soluciones innovadoras para abordar los impactos negativos del cambio climático, especialmente en lo que respecta al suministro y tratamiento del agua.
El cambio climático también ha creado nuevas oportunidades de negocio en el sector del manejo del agua. Aquí se exploran algunas oportunidades para que emprendedores, empresarios y centros educativos orienten sus esfuerzos hacia el desarrollo y ofrecimiento de productos y servicios que mitiguen los impactos del cambio climático en la vida diaria y, al mismo tiempo, generen recursos importantes.
Existe una creciente demanda de tecnologías y soluciones que permitan capturar agua, ya sea de la humedad de la atmósfera, como lo hacen los chilenos en el desierto de Atacama, el más seco del mundo, o mediante la desalinización del agua. Millones de personas que viven cerca del mar carecen de agua potable, por lo que equipos pequeños para desalinizar agua y proveer el consumo de una familia, aprovechando el sol como fuente de energía, tienen un gran futuro.
Otro reto importante es potabilizar agua, ya que prácticamente es imposible encontrar una fuente de agua que no esté contaminada. En lugares como Polonia, un país con grandes fuentes de agua, como aguas subterráneas, ríos y lagos, todas están contaminadas. Es alarmante pensar que, en Colombia, el agua de las zonas pobladas esté en una condición similar.
Se requieren filtros personales, familiares, comunitarios y de gran tamaño para garantizar la calidad del agua, ya que un alto porcentaje de las enfermedades se deben a su mala calidad. Por lo tanto, cualquier producto o servicio que entregue agua potable tiene un amplio mercado local, nacional e internacional.
Las aguas residuales son responsables de la contaminación del suelo y de las mismas fuentes de agua. Es urgente desarrollar procesos que limpien e incluso potabilizar las aguas servidas, ya que en muchas ocasiones son la única fuente de agua disponible.
El cambio climático también ha llevado a un aumento en los eventos climáticos extremos, como inundaciones y tormentas más intensas. Estos eventos pueden contaminar el suministro de agua y afectar la infraestructura de tratamiento existente. Aquí también se presentan oportunidades de negocio para empresas especializadas en la gestión de inundaciones y en el desarrollo de sistemas de tratamiento de agua más resistentes y adaptables a condiciones extremas.
Los sistemas de almacenamiento de agua proveniente de inundaciones, para poder utilizarla en épocas de sequía, son esenciales. En Colombia, hemos pasado de enfrentar grandes extensiones inundadas a lagunas secas en tan solo unos meses. Definitivamente, los sistemas que permitan regular los picos de abundancia y escasez de agua son indispensables.
Estas oportunidades no solo ayudan a mitigar los impactos del cambio climático, sino que también pueden generar empleo de calidad, beneficios económicos y contribuir al desarrollo sostenible a largo plazo