Asamblea por Reformas Sociales, Paz y Unidad concluye en Bogotá
Bogotá, 15 sep (Prensa Latina) La Asamblea por las Reformas Sociales, la Paz y la Unidad, de Colombia concluirá hoy en esta capital con la participación de unos cinco mil delegados, que celebraron previamente reuniones de base en sus respectivos territorios.
En el encuentro, celebrada en la Universidad Nacional, se discute en torno a nueve ejes temáticos en cinco mesas, con el objetivo de repasar lo alcanzado en materia social, económica y política en los primeros dos años del gobierno de Gustavo Petro, así como establecer una guía de movilización local, regional, nacional e internacional para el periodo restante.
Otras de las metas de la cita, organizada por las centrales obreras y la coalición Pacto Histórico, es fortalecer la unidad de los movimientos progresistas del país y erigirse en una plataforma de articulación y fortalecimiento del poder popular en respaldo a un proyecto de país que vele por los derechos de la mayoría.
Durante la primera de sus jornadas, efectuada ayer, el presidente del país, Gustavo Petro, instó a los presentes a constituir Comités de Defensa del Cambio para salvaguardar las medidas que buscan la reivindicación social y para velar por el cumplimiento de la democracia.
Según explicó el mandatario el deber de estas instancias, que deben crearse en municipios, veredas y regiones, “es convocar a la población el día, los días o los meses necesarios para rodear al poder y transformarlo”.
Como parte de su discurso, el jefe de Estado reiteró las amenazas que se ciernen sobre su gobierno e incluso comentó acerca de los planes para acabar con su vida.
“Ponen el billete a ver si Petro desaparece en diciembre, se los voy a decir: con el dinero que ponen compraron dos volquetas y la idea que tienen es llenarla de dinamita y explosivos, y con información interna de mis rutinas, hacer volar la volqueta a mi paso”, relató el gobernante.
Reiteró su denuncia de que se fragua un golpe blando en su contra materializado con la orden de retirarle su fuero constitucional, orientado por tres magistrados que no tienen competencias para decidirlo, ni potestad para establecer que el Consejo Nacional Electoral lo puede juzgar.
“No podemos dormirnos porque nos quieren hacer dormir. Si ellos desatan el golpe de estado, -es con corbatas que lo van a desatar, con decisiones ilegítimas- se le responde popularmente con una revolución”, sentenció.