El Ojo del Halkón Informar no editorializar
Por Rubén Darío Mejía Sánchez
Parece que el periodismo colombiano haya cambiado en los últimos años, esa gran escuela que se reafirmó con Yamid Amat de los buenos informadores parece que ha quedado atrás y ahora ya no hay periodistas sino opinadores, porque eso es lo que hacen cuando presentan una noticia.
Es muy diferente informar a opinar y creo que la labor del periodista debe ser informal y no desinformar y parece también que hemos que estamos cayendo en aquello de que conozca escándalos es que se consigue audiencia lo mismo que con el amarillismo, cuando de verdad se consigue audiencia diciendo las cosas como son y mostrando las cosas bien y positivas que tiene el país.
Ahora con motivo de la Cop16, Caracol televisión ha hecho una serie de informes que han logrado cautivar a la audiencia, le han mostrado al país y a los ciudadanos cosas que no habían visto a pesar de tenerlas al lado y que como siempre nunca valoramos lo que tenemos, sino que buscamos lo negativo olvidándonos de las bellezas de la naturaleza y de la gran manera de trabajar de ese puñado de gente buena que hay en Colombia, pero para los medios de comunicación es más importante mostrar el atraco callejero y repetir la noticia durante tres cuatro días, como dijera mi abuela con pelos y señales para que los morbosos, hablo morbosos de manera de pensar se deleiten dándose cuenta como se hizo el robo, cómo sucedieron las cosas y cómo los delincuentes quedaron libres..
Nos ponemos a ver a pocos días de empezar la COP 16, todas las cosas buenas que se están haciendo en Cali, para mostrar no solo la cara y la imagen del país sino de una gran ciudad como es la capital del Valle, pero con tristeza vemos como los grupos subversivos tratan de dañar esa imagen con sus ataques en el valle y en el departamento del cauca. Y el departamento estarán muy bien blindado, pero creo que debe estar mejor blindado por una sociedad que se sabe comportar y por un pueblo que busca decirle al mundo cuánto valemos los colombianos, además de tener las mejores y bellas riquezas naturales, que cada día van desapareciendo por la mano del hombre.
En una autocrítica como periodista, creo que los periodistas debemos de verdad informar, buscar que el nombre de Colombia esté en las primeras páginas de los rotativos del mundo, lo mismo que nosotros medios de comunicación por las cosas buenas que hace y no por las cosas malas que se presenta, lo que no quiere decir que no debemos demostrar las cosas malas, debemos demostrarlas y buscarle solución y ese sí sería el verdadero periodismo.
Pero seguimos trabajando para las empresas y nos estamos olvidando del lector que es el clave número uno y el porqué de nuestro trabajo.
Hay mucha capacidad intelectual, hay muchos periodistas buenos, pero hay que desamarrarlos, hay que dejarlos libres para que digan lo que tienen que decir y que quienes van a opinar opinen, porque muchos les estarán preguntando en este momento como yo de periodista también opino, sí lo hago, pero dejó aparte una cosa con la otra cuando cuenta una noticia estoy contando una noticia y cuando estoy opinando estoy opinando bajo mi propia responsabilidad.
Trabajemos por el bien de este país,.
