La diplomacia no es para subordinar pueblos o arrodillarlos: Petro tras despedida a Palmieri

El presidente Gustavo Petro destacó el trabajo de Palmieri y criticó una vez más las políticas prohibicionistas de Estados Unidos
Bogotá, enero 27_ 2025_ RAM _ En un mensaje de despedida, el presidente Gustavo Petro se refirió a la salida de Francisco Palmieri como Encargado de Negocios de Estados Unidos en Colombia, agradeciendo su disposición para entender la realidad colombiana, pero señalando que hubo discrepancias en temas claves con el país norteamericano.
“De Palmieri me llevo la mejor de las imágenes. Hijo de colombiana, supo entender mi país y mi gobierno. Aunque en muchas materias tuve discrepancias con EE. UU., la mayor: su apoyo al genocidio en Gaza, por el cual el Partido Demócrata perdió a la juventud y las elecciones, pudimos fluir en muchas materias y conté con su apoyo y el de Biden en temas como la lucha contra la crisis climática y la ofensiva en la incautación de grandes cargamentos de drogas”, dijo Petro.
El mandatario reiteró sus críticas hacia la política de prohibición de drogas, afirmando que esta ha generado un millón de asesinatos en América Latina desde su implementación y ha convertido a la región en una de las más violentas del mundo “ha llevado a EE. UU. a lo peor: el encarcelamiento de buena parte de la población negra y el paso a las drogas de alto impacto como el fentanilo”.
Ante la crisis diplomática vivida con Estados Unidos, el presidente reafirmó la importancia de una diplomacia basada en el respeto y la igualdad: “La diplomacia no es para subordinar pueblos o arrodillarlos. La diplomacia debe ser franca y libre, pero siempre entre iguales”.
Por su parte, Laura Sarabia, recién nombrada Canciller destacó el rol de Palmieri en el fortalecimiento de las relaciones bilaterales: “Francisco Palmieri ha sido un pilar clave para fortalecer nuestra relación con Estados Unidos. Su trabajo como embajador en Colombia ayudó a consolidar la cooperación en áreas estratégicas como transición energética, comercio y paz
Adios
De Palmieri me llevo la mejor de las imagenes. Hijo de colombiana, supo entender mi país y mi gobierno. Aunque en muchas materias tuve discrepancias con EEUU, la mayor: su apoyo al genocidio en Gaza, por el cual el partido democrata perdió a la juventud y las elecciones, pudimos fluir en muchas materias y conté con su apoyo y el apoyo de Biden en temas como la lucha contra la crisis climática y la ofensiva en la incautacion de grandes cargamentos de drogas, no porque este de acuerdo con la prohibición, sino porque estando prohibidas, las grandes masas de dinero que acumulan los narcos, se convierte en muertes de decenas de miles de colombianos.
La prohibición ha dejado un millón de latinoamericanos asesinados desde que se implementó la política de Nixon en los EEUU, la mayoria de los asesinados han sido colombianos.
La prohibición de las drogas de bajo impacto como la marihuana y la cocaína, nos han llevado a ser la región más violenta del mundo, y eso dispara la migración a EEUU. Ha llevado a EEUU a lo peor: el encarcelamiento de buena parte de la población negra y el paso a las drogas de alto impacto por su mortalidad, la droga de los tiempos de la extinción; el fentanilo
Entre la política prohibicionista, los bloqueos económicos a Cuba y Venezuela, en la práctica a Haití, la costumbre de subir artificialmente la tasa de interés de la deuda externa latinoamericana y la crisis climática galopante, todas generando pobreza e inseguridad, encontramos la causa de las migraciones hacia EEUU.
La solución a la migración ilegal por tanto no es simplemente deportar pueblos y criminalizarlos. Es actuar sobre las verdaderas causas de la migración. El diferencial de riqueza y las causas de la pobreza latinoamericana. Quiten los spreads a la deuda latinoamericana y verán como latinoamerica crece y deja de expulsar su población. Quiten la.prohibición y verán como, en pocos días, latinoamericana y varias ciudades de EEUU, volverán a la paz.
En relaciones internacionales debemos tener claro un principio; podemos llegar a acuerdos provechosos para los pueblos, podemos discutir libremente en las mesas diplomáticas, disentir si es el caso, pero jamás podemos aceptar que se nos impongan condiciones. La diplomacia no es para subordinar pueblos o arrodillarlos. La diplomacia debe ser franca y libre, pero siempre entre iguales.
Buen viaje embajador Palmieri.