Cali supo aprovechar dos expulsiones para el América y ganó el clásico
Por Jacobo Rivera
Fotos Samir Rojas
Palmaseca, 08 de febrero_ RAM_ En el clásico vallecaucano 290, Deportivo Cali derrotó al América y mantiene el invicto en la Liga. Fue un clásico intenso con tres goles y una serie de expulsiones que desacomodaron la pizarra del conjunto americano a quince minutos del final.
El resultado en el estadio Deportivo Cali fue de 2-1 a favor del Cali, que en el último aliento ganó el juego con un gol de Lizarazo, impulsado más por los gritos de la gente y la ventaja numérica que por su fútbol.
Triunfo que le sube el ánimo a los jugadores dirigidos por Arias que llevaban dos partidos seguidos sin poder marcar y hoy sufrieron bastante para vencer a un rival que antes de las dos tarjetas rojas dominaba el juego a placer en una cancha que siempre le ha sido complicada, como ninguna otra en Colombia.
A los tres minutos el extremo Jhon Vásquez, realizó una buena jugada desde la banda derecha para filtrarse en el área con peligro,y fue cuando Jaramillo lo derribó y provocó un penal claro. Al frente del cobro se puso un Palavecino para sentenciar el 1-0 de derecha.
El gol, sin embargo, no cambió el ajedrez que tenía previsto el América de Guimaraes, con su línea de tres volantes y con un Adrian Ramos, que fue el mejor de la visita, retrasando su posición para generar juego, y que, así la ‘Mecha’ creó opciones claras que terminaron en las palmas de González. La más clara del primer tiempo, quizá, una de Sierra a quemarropa.
El empate rojo llegó en el segundo tiempo gracias a una jugada en donde Ramos mostró su experiencia y calidad. Bajó hacia atrás un balón que la había lanzado Carrascal desde el medio para dejárselo servido a Vergara, quien con un remate exquisito bañó a González para el 1-1.
A esa altura del partido, América dominaba a un Cali que se mostraba impreciso con la pelota, pero llegaron las dos expulsiones, la primera para Rangel por doble amarilla, y la segunda, de Carrascal, por protestarle al árbitro.
El juego se desconfiguró y Cali aprovechó que tenía en cancha a dos hombres de más y a más de 10mil almas en las tribunas para buscar los tres puntos y fue sobre el final, cuando apareció Lizarazo, para cachetear de zurda un balón que le puso Arroyo para poner a delirar a la grada en Palmaseca.
Cali hizo la tarea de ganar frente a un rival destruido por las expulsiones, y ahora lo mira desde arriba en la tabla de posiciones.