Viviendas VIP estrato 6 generarían multimillonario detrimento patrimonial
El primer antecedente se registró en 2013, cuando la Administración Distrital hizo el anuncio de que tomaría el lote de la Plaza de la Hoja, que estaba destinado para el nuevo CAD, para la construcción de 457 apartamentos VIP.
El pasado viernes, el gerente de Metrovivienda anunciaba que tres valiosos lotes, ubicados en zonas exclusivas de la ciudad serían usados para construcción de viviendas gratis, lo que ha simple vista parece una descabellada idea petrista sobre la unificación social de Bogotá.
Lo cierto, es que en números, con esta idea la Bogotá Humana estaría generando un multimillonario detrimento patrimonial a la ciudad, teniendo en cuenta que uno solo de esos lotes podría venderse en un precio cercano a los 30 mil millones de pesos, lo que significaría la construcción de unas 700 viviendas VIP en otro punto de la capital. La actual propuesta de Petro solo beneficia a 96 familias.
Por su parte, es lógico, que por su ubicación, esta viviendas estarían en el orden de los 250 millones de pesos, lo que se sale de la norma del Gobierno Nacional que estipula que las viviendas VIP no deben exceder los 48 millones de pesos.
Por su parte, el representante a la Cámara del Centro Democrático, Samuel Hoyos, criticó la decisión y la calificó como una decisión irresponsable.
“Es una actitud populista e irresponsable. Con el déficit de vivienda que tenemos en Bogotá, entregar una vivienda en estrato 6 significa dejar de entregar 10 viviendas en otros sectores de la ciudad por un capricho político del alcalde. Lotes en esos sectores pueden tener un valor de 40.000 millones de pesos, haría 10 veces más casas en otro sector de la ciudad”, aseguró Hoyos.
El representante por Bogotá agregó que “los principales afectados son los pobres, a ellos los está privando de tener una vivienda. Petro con tal de ‘joder’ a los ricos, está dispuesto a ‘joder’ a los pobres. El Distrito debe ayudar a los desplazados y darles una vivienda pero no de esa manera. Eso es un manejo irresponsables de los recursos públicos, hay que optimizarlos para hacer la mayor cantidad de viviendas posibles”.