Inflación en Colombia aceleraría en abril pese a limitaciones por pandemia
Por Nelson Bocanegra
BOGOTÁ, 29 abr (Reuters) – La inflación en Colombia aumentaría en abril debido a presiones sobre los precios de los alimentos y los servicios públicos pese a las limitaciones derivadas de la pandemia de COVID-19, mientras que se esperan mayores variaciones a fin de este y el próximo año, reveló el jueves un sondeo de Reuters.
Según la mediana entre 17 analistas, los precios al consumidor aumentarían un 0,33% en abril, en comparación con el incremento de 0,16% que marcaron en igual mes del año previo.
No obstante, la variación sería inferior al 0,51% que reportaron los precios en marzo pasado.
De cumplirse la proyección, la inflación acumularía un 1,69% en los últimos 12 meses hasta abril, superior al 1,51% al cierre de marzo.
«En cuanto a factores que puedan influenciar el comportamiento de precios, tenemos algo de servicios públicos en el tema del sector de vivienda, por la reversión de precios en temas como energía e incluso en acueducto», dijo Camilo Pérez, economista jefe del Banco de Bogotá.
«De otro lado tenemos algunos impactos menores en restaurantes y hoteles que han registrado aumentos un poco por encima de lo habitual aún con los cierres de la economía», agregó.
En la consulta aumentaron las expectativas de inflación para este año a un 2,82%, desde el 2,74% del sondeo del mes pasado.
En la misma línea, para el cierre del 2022 las expectativas subieron a un 3,07%, en comparación con la encuesta anterior en la que según la mediana los agentes esperaban que finalizara en la meta puntual del Banco Central, de 3%.
«La economía colombiana empezará a tomar tracción y cobrar los efectos de base estadística, lo que nos hace suponer que dejaremos lentamente los niveles bajos de la inflación en especial viendo la tendencia registrada de esta variable en economías de la región», dijo Wilson Tovar, gerente de estudios económicos de la correduría Acciones y Valores.
Los agentes también esperan presiones sobre los precios derivados de una potencial aprobación de una polémica reforma fiscal que se tramita en el Congreso, que incluiría la eliminación de exenciones al cobro del IVA, entre otros.
No obstante, el efecto aún no ha sido calculado debido a que está en duda el monto que se aprobará en el proyecto de ley por parte de los legisladores.
Aunque el Gobierno buscaba originalmente 23,4 billones de pesos (6.324 millones de dólares), el viceministro de Hacienda, Juan Alberto Londoño, dijo que se podría reducir a entre 18 billones y 20 billones de pesos.