martes diciembre 17 de 2024

La cueva de las bestias “Para los antiguos las cosas no existen hasta que se nombran” Iván Moreno

El arqueólogo y antropólogo Yasser El Laithy concedió una entrevista al periodista Jairo Fernando Valencia

Por Jairo Valencia

Corresponsal en Europa

Sevilla España, 24 septiembre, 2022_RAM_La tarde del pasado domingo 18 de septiembre, final del verano de 2022 en Marbella (España), fue cuando menos especial. No solo por ser el final de la época estival y el principio de un nuevo conocimiento científico, sino porque se estaba discutiendo, en el teatro del Palacio de Congresos, sobre un tema que revoluciona al mundo culto, en especial, al que se ocupa de interpretar los misterios de la historia, las evidencias arqueológicas sobre la vida cotidiana y la religión en la época neolítica. Y como guinda para el pastel, la presentación del libro, El éxodo del Edén.

Este panorama científico y religioso hace que la siguiente entrevista con el eminente arqueólogo y antropólogo el doctor Yasser El Laithy sea, además de interesante, necesaria, pues son muchas las cuestiones a tratar. Empecemos por esbozar algunas de ellas.

Yasser El-Laithy nació en el barrio de las pirámides, en Guiza (Egipto), el 15 de mayo de 1975. Su padre fue Abdel Tawab El Laithy, de quien dice nuestro entrevistado fue un ejemplo de devoción y sinceridad. A Sadaya El Laithy, su madre, es a quien le debe las cualidades que hoy admiramos en él.

Yasser es el padre de tres hijos: Farah, Youssef y Yara. Actualmente vive en Lausana (Suiza) con su esposa, Mafalda Rufino, natural de Sines, Portugal. De ella, este acota que es el motor que mueve su vida, además de valorar su apoyo invaluable e incondicional.

Así respondió a nuestro corresponsal en Europa para Reporteros Asociados del Mundo, Jairo Valencia.

¿Por qué además de la arqueología se dedicó a la antropología?

Estando en el Museo Egipcio de El Cairo en Egipto, estudiando La Paleta de Narmer, una persona me hizo un comentario, dijo: “Esta paleta no puede ser el principio, antes de ella debe haber mucho arte y conocimiento que no hemos descubierto”.

Esto que me impresionó, fue inspiración para mí, para que yo estudiara una carrera nueva en mi vida, estudiar la antropología. 

¿Por qué están importante la antropología para la arqueología?

Por dos razones:  la primera, porque la antropología enriquece la ciencia de la arqueología, guiando al científico para que desarrolle acertadamente una investigación. Segunda, porque la misma antropología ayuda mucho al investigador a utilizar otras ciencias de una manera cooperada, para sacar una conclusión general y final.

¿Por qué la antropología influye de forma tan especial en la egiptología?

Porque la egiptología es un ramo de otro ramo de la antropología, que nos ayuda a dar respuesta a las preguntas misteriosas.

¿Cuáles son esas preguntas misteriosas?

En el mundo academioco siempre se dan las preguntas misteriosas. En mi caso las preguntas misteriosas son: ¿De dóde vivieron los faraones?

La famosa piedra de Palermo habla, no lo suficiente,  de algunos reyes medio dioses que gobernaron Egipto antes del rey del Antiguo Egipto, Narmer. ¿Quiénes son esos reyes medio dioses?

¿Cómo fue construida la Gran Piramide?

¿Por qué al ser humano le cuesta tanto aceptar las conclusiones de los científicos sobre temas de la prehistoria, por ejemplo?

Porque la mayoría de los académicos les tienen miedo a las novedades, ignorando la característica especial de la ciencia: la novedad. Y que la ciencia es renovable, que no es fija. Si fuera fija ya no sería ciencia, sería religión.

Las pinturas rupestres estudiadas e interpretadas por usted, le hablo de su trabajo en el Desierto Occidental y la Gran Meseta del Al Guilf Al Kabir, ¿cambian la forma de ver la prehistoria?

Totalmente. Los que descubrieron esta caverna en el año 2002 no pudieron analizar bien estas pinturas, pensaron que eran iguales a otras que están en toda África y otros lugares del mundo como Francia. Pero yo, con mis ojos de egiptólogo y antropólogo, me di cuenta de que estas eran distintas, que estas pinturas tienen que ver mucho con el culto posterior, con el culto faraónico. Mi teoría era una teoría nueva, que avaló el famoso arqueólogo mundial, doctor Zahi Hawass, que dijo que mi trabajo enriquece la biblioteca arqueológica mundial y no solo la egipcia.

Doctor Yasser, ¿qué nombre tiene la teoría en mención?

La teoría se llama El origen neolítico de la cultura faraónica.

¿Cuáles son las diferencias a destacar en las pinturas rupestres de Altamira y las de Las Cuevas de las Bestias en la Gran Meseta del Al Guilf Al Kabir?

Las pinturas rupestres de Altamira en España y otras de diferentes lugares del mundo hablan de un tema común que es la vida cotidiana. En las pinturas rupestres de la Caverna de las Bestias es distinto. Pues, estas, hablan del más allá, son pinturas rupestres dogmáticas, esto es algo nuevo en la prehistoria.

¿Por qué como arqueólogo, usted hace más énfasis en la egiptología que en la época faraónica?

Porque de la época faraónica nos llegaron muchos textos, miles de papiros, que nos hablaban de muchas cosas de la vida cotidiana. Pero curiosamente no nos dan detalles de la Gran Pirámide, de cómo fueron construidas las pirámides.

Hablemos de su libro, ¿por qué lo llamó Éxodo del Edén?

Lo llamé Éxodo del Edén porque la zona de la Meseta de Al Guilf Al Kabir era un jardín magnífico. Según vestigios hace miles de años, era uno de los lugares más hermosos del mundo, pero por un cambio climático, el jardín se hizo desierto y las personas tuvieron que salir de allí. Y porque recordé el relato bíblico del Génesis donde dice que Adán tuvo que salir del paraíso.

Es importante destacar que varios científicos coincidimos en decir que el Edén del que habla la Biblia es este lugar en África.

Doctor Yasser EL Laithy, por favor, apórtenos una conclusión para cerrar esta conversación.

Mi conclusión, al terminar el estudio de las pinturas rupestres que mencionamos, es que toda la humanidad debe ser tolerante, quererse y respetarse, porque todos venimos del mismo jardín y de la misma fuente biológica.

Y así, con más preguntas en el tintero, con ganas de más, nos despedimos de este extraordinario ser humano. Salimos de Marbella rumbo a Sevilla meditando en una expresión que oí por ahí: “El conocimiento no es malo ni bueno, sino como se utiliza”. Con razón el doctor Yasser El-Laithy dijo alguna vez: “El conocimiento lleva al respeto y el respeto a la sana convivencia”.

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