Santos destaca ‘condiciones’ de América Latina para atraer inversión
La II Cumbre de Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) concluyó este miércoles con la presentación de la Declaración de La Habana y la constatación del poder de convocatoria de Raúl Castro y de Cuba.
Al menos 31 mandatarios de los 33 países que integran la Celac, incluido el presidente colombiano Juan Manuel Santos, participaron en las plenarias que convirtieron por dos días a La Habana en la capital de Latinoamérica.
Antes de abandonar la isla, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, uno de los invitados de honor, le pidió al Gobierno cubano ratificar los pactos de derechos humanos del 2008, al referirse a la “detención arbitraria” de opositores.
Por su parte, Santos destacó el crecimiento de Colombia y la disminución del desempleo. Explicó que para luchar contra la pobreza hay que “ser realistas” y aceptar que se necesita que crezca la economía. “Economía que no invierte, economía que no crece”, aseguró.
El mandatario colombiano defendió que la región “reúne todas las condiciones” para atraer inversiones, pues tiene reservas de agua, alimentos, energía, y población joven. Así mismo destacó que la Alianza del Pacífico no es “excluyente”, a lo que el presidente de Bolivia, Evo Morales, le replicó que ese grupo quiere privatizar el agua y que este “es un derecho humano básico que no se debe privatizar”.
Respecto a la lucha contra las drogas, Santos admitió la necesidad de discutir con todos los elementos y no solo desde la represión. “Hemos sido relativamente exitosos en reprimir al narcotráfico”, señaló. Pero agregó que a veces tenía la impresión de que el país está en “una bicicleta estática”.
Sobre el tema de la paz, el Presidente colombiano agradeció a todos los presentes, especialmente a Cuba, Venezuela y Chile, por el apoyo a los diálogos con las Farc. “Hemos avanzado como nunca antes”, puntualizó. También se declaró optimista de que cuando la Celac se reúna “el año próximo en Costa Rica el conflicto armado haya terminado”.
Durante la cumbre, los jefes de Estado y gobierno declararon a América Latina como una “zona de paz” y libre de armas nucleares. También destacaron el poder de la integración pese a la diversidad.
Además, los líderes comentaron sobre mecanismos para erradicar la pobreza –tema fundamental de la cita–, la solución de los diferendos por vías pacíficas, el desarrollo sostenible y cambio climático. Otra de las iniciativas es la creación de un foro económico Celac–China por el papel actual del gigante asiático en el mundo.
El documento final de la cumbre condena el bloqueo unilateral de Estados Unidos contra Cuba y el rechazo a la inclusión de la isla en la lista del Departamento de Estado de países terroristas. De hecho, muchos de los gobernantes le dieron la espalda a la pasada cumbre de las Américas como protesta.
Aunque la presencia de la OEA por medio de su secretario general, José Miguel Insulza, fue un hecho destacado, esta no significó, al menos de momento, un acercamiento de la isla con el organismo. Fue invitado por “cortesía”, dijeron fuentes de la cancillería cubana.
