miércoles julio 17 de 2024

El Papa Francisco elogió el «esfuerzo» de la iglesia cubana

21 septiembre, 2015 Generales, Internacionales

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 Holguín de Cuba, 21 de Septiembre_ RAM_  El sumo pontífice ofició su segunda misa masiva, en Holguín, durante la gira por la isla y Estados Unidos; «las casas de misión son pequeños signos de la presencia de Dios», dijo

El papa Francisco, el tercer pontífice que vista Cuba en 17 años, luego de Juan Pablo II en 1998 y Benedicto XVI en 2012, arrancó este lunes el segundo tramo de su viaja a Cuba, con visitas a las provincias orientales de Holguín y Santiago.

En un mensaje más que nada pastoral, en el que habló del ejemplo de Jesús en la vida de los cristianos, el Sumo Pontífice elogió el esfuerzo de la iglesia cubana. Luego de la misa, el papa se dio un apretón de manos con Raúl Castro y luego emprendió viaje hacia la Loma de la Cruz, un sitio ícono de la ciudad de Holguín.

Sé con qué sacrificio la iglesia en Cuba trabaja para llevar a todos, aún en los sitios más apartados, la palabra y la presencia de Cristo

«Sé con qué sacrificio la iglesia en Cuba trabaja para llevar a todos, aún en los sitios más apartados, la palabra y la presencia de Cristo», destacó Francisco en su homilía.

«Una mención especial merecen las llamadas casas de misión que, ante la escasez de templos y de sacerdotes, permiten a tantas personas un espacio de oración, de escucha de palabra, de catequesis y vida de comunidad», dijo.

«Son pequeños signos de la presencia de Dios en nuestros barrios y una ayuda cotidiana para hacer vivas las palabras del apóstol Pablo: «Les ruego que anden como pide la vocación a la que han sido convocados»».

Según la agencia española Efe, hay 70 «casas de misión» en la diócesis de Holguín, donde además hay 32 parroquias y 18 locales dedicados al culto.

La gira del Papa

Francisco viajó temprano y llegó a Holguín, la tercera mayor ciudad de Cuba y que nunca ha visitado un papa. Allí ofició su segunda misa masiva antes de partir hacia Santiago, en el extremo oriental de la isla.

El pontífice saldrá de Santiago a Estados Unidos, como parte de una gira que el Vaticano ha dicho busca construir puentes. El papa ha jugado un papel de intermediación para que ambos países se acercaran luego de cinco décadas de tensiones.

Francisco llegó el sábado por la tarde a Cuba y tuvo una extensa jornada el domingo. Se reunió con el líder de la revolución, Fidel Castro y dio una misa a la que asistieron el líder del régimen, Raúl Castro, y Cristina Kirchner. La homilía se realizó en la famosa Plaza de la Revolución y tuvo como telón de fondo las imágenes de Camilo Cienfuegos y del Che Guevara; en ella el papa habló de la importancia de servir al prójimo y no a una ideología.

Euforia y expectativa

Miles de personas ya se reunían en la Plaza de la Revolución de Holguín, aún antes de que el papa saliera de La Habana.

«Este es el que va a transformar el mundo, que nos hace falta, especialmente a la juventud», dijo Idael Confesor Martínez Leyva, una mujer de 58 años que llegó para la misa con un sombrero de paja que tenía banderas del Vaticano y Cuba.

«Este papa es del pueblo, habla por nosotros», dijo Juana Isabel González, una técnica en epidemIología de 57 años. «Esperamos que mueva el corazón de aquellos (los líderes estadounidenses) y que nos levanten el bloqueo», agregó la mujer en relación a las sanciones impuestas por Washington a la isla desde la década de 1960, presionando por un cambio en el modelo político de la nación caribeña.

A pesar de que un bajo porcentaje de los cubanos se considera católico practicante -en la isla hay muchos cultos de afrodescendientes y una fuerte influencia del laicismo impulsado por el proceso revolucionario-, en las calles hay carteles dándole la bienvenida. Incluso instituciones oficiales y algunas de las avenidas por las que transitará fueron decoradas con banderas con los colores vaticanos y de Cuba.

Santiago de Cuba conmovida ante la visita del tercer papa

Por Martha Cabrales Arias

Santiago de Cuba, 21 de Septiembre_ RAM_  Cuando el avión de Alitalia arribó al filo de las cinco de la tarde, esta ciudad se convirtió en la única, fuera de la capital, en recibir a los tres papas que han visitado a Cuba.

Ese privilegio, hecho realidad con la llegada de Francisco, se inició con la presencia de Juan Pablo II y la misa multitudinaria que ofició en la Plaza de la Revolución Antonio Maceo en 1998 y tuvo su hito más reciente con la impronta de Benedicto XVI en el 2012.

Particular regocijo experimentan los habitantes del poblado de El Cobre, a unos 22 kilómetros de la urbe, quienes reciben por segunda vez a un Sumo Pontífice, tras acoger hace tres años en esos predios y, en particular en el Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad, a un Papa.

A lo largo de unos tres kilómetros, desde el sitio conocido por Melgarejo y hasta el enclave religioso, se congregaron cientos de hombres, mujeres y niños para ofrecer una bienvenida popular, a la cual se sumó simbólicamente la belleza natural del verde lomerío de la Sierra Maestra.

Otra alegoría que acompañó el breve paso de Francisco por la urbe, en su recorrido hacia El Cobre, fue la lluvia que comenzó a caer minutos después sobra una tierra duramente castigada por una intensa y prolongada sequía.

Las vallas y afiches con el rostro del Papa y las telas blancas y amarillas junto a las banderas cubanas engalanan calles y avenidas de la travesía que seguirá Su Santidad cuando mañana haga el trayecto a la inversa y reciba entonces nuevas muestras de afecto y respeto de miles de lugareños.

En el antiguo asentamiento minero se darán cita en la mañana del martes personas llegadas desde toda Cuba para escuchar las palabras del Obispo de Roma en la misa que ofrecerá en la Basílica Menor, donde esta tarde-noche rezará a la deidad y tendrá un encuentro con los obispos cubanos.

Minutos antes de su partida al mediodía, la máxima autoridad de la Iglesia católica interactuará con familias cubanas en la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral y desde el atrio bendecirá a la ciudad que acaba de cumplir cinco siglos, ante cientos de santiagueros presentes en el céntrico parque Céspedes.

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