El viernes se votará el articulado del plebiscito que decidirá el futuro de Colombia
Culminó la revisión del articulado que tendrá el plebiscito con el que los colombianos aceptarán o no los acuerdos de paz a los que el Gobierno de Juan Manuel Santos llegue con la guerrilla de las Farc en la Habana, Cuba.
Terminado este trámite legislativo por la comisión creada especialmente para ello, se procederá a votar este viernes para luego de ser aprobado ser enviado a revisión a la Corte Constitucional.
“Quedó muy claro que el presidente de la República es el que convoca el plebiscito con la firma de todos sus ministros, que será una votación de un solo día, que el umbral va a ser del 13 % del censo electoral por el sí para avalarlo, y que habrá equidad e igualdad para los que promuevan el sí y el no”, dijo el senador Armando Benedetti.
El plebiscito desarrolla y dota de eficacia los principios de soberanía popular, y democracia participativa, permitiendo que los ciudadanos se pronuncien sobre políticas del Ejecutivo. A través de la refrendación popular, la ciudadanía decide en forma democrática, asuntos relativos a los destinos de la Nación.
Según lo aprobado por la Cámara de Representantes, el proyecto queda así:
Artículo 1. Convocatoria del Plebiscito por parte del Presidente:
El Presidente de la República, con la firma de todos los Ministros, podrá someter a consideración del pueblo el Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera, mediante plebiscito.
Artículo 2. Reglas especiales para este Plebiscito que refrenda el Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera.
Los procedimientos de convocatoria y votación se regirán por las siguientes reglas:
El Presidente deberá informar al Congreso su intención de convocar a este plebiscito y la fecha en que se llevará a cabo la votación.
La fecha no podrá ser anterior a un mes, ni posterior a cuatro meses, contados a partir de la fecha en que el Congreso reciba el informe del Presidente.
El Congreso deberá pronunciarse en un término máximo de un mes. Si se pronuncia negativamente deberá hacerlo con una mayoría simple de los miembros de las respectivas Cámaras. Si el Congreso está en receso, debe convocarse para decidir sobre este particular.
Si dentro del mes siguiente a la fecha en la que el Presidente de la República informe su decisión de realizar el Plebiscito, ninguna de las dos Cámaras manifiesta su rechazo, el Presidente podrá convocarlo.
Se entenderá que la ciudadanía aprueba el plebiscito por la paz en caso de que la votación por el “Sí” obtenga una cantidad de votos mayor al 13% del censo electoral vigente (4 millones 396 mil 625 votos) y supere los votos depositados por el “No”.
La organización electoral garantizará el cumplimiento de participación en condiciones de igualdad, equidad, proporcionalidad e imparcialidad, de la campaña por el sí o por el no, para lo cual regulará el acceso a los medios de comunicación y demás disposiciones necesarias.
Salvo prohibición de la Constitución Política, los servidores públicos que deseen hacer campaña a favor o en contra podrán debatir, deliberar y expresar pública y libremente sus opiniones o posiciones frente al plebiscito. Queda prohibido utilizar bienes del Estado o recursos del tesoro público, distintos a aquellos que se ofrezcan en igualdad de condiciones a todos los servidores.
Podrán votar los colombianos residentes en el exterior a través de los consulados.
Las campañas del “SÍ” y “NO” tendrán idénticos deberes y garantías, espacios y participación en los medios y mecanismos.
Artículo 3: Consecuencias de la decisión:
– Los resultados obtenidos en las urnas a través de este Plebiscito tendrán un carácter vinculante para el desarrollo constitucional y legal del Acuerdo Final.
En consecuencia, el Congreso, el Presidente de la República y los demás órganos institucionales y funcionarios del Estado, dentro de la órbita de sus respectivas competencias, dictarán las disposiciones que les correspondan para acatar el mandato proveniente del veredicto del pueblo expresado en las urnas.
Artículo 4: Remisión Normativa:
En lo no previsto en esta ley se aplicará lo dispuesto en la Ley de Participación Ciudadana (134 de 1994 y 1757 de 2015), como por ejemplo las garantías para hacer campañas previa a la votación del Plebiscito, espacios para la oposición, entre otros.
Artículo 5: Divulgación de los acuerdos.
El Gobierno deberá divulgar de manera permanente en su integridad el contenido del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera, 30 días antes a la fecha de votación del Plebiscito.
– Se deberá divulgar en páginas web de Gobierno, redes sociales, periódicos, tv y radio pública y privada y Urna de Cristal.
– En las zonas rurales del país el Gobierno nacional garantizará, a través de las entidades comprometidas, una mayor publicación y divulgación del contenido del acuerdo final.
– El Gobierno nacional, a través de embajadas y consulados, socializará a los colombianos en el exterior, especialmente a víctimas del conflicto armado, el contenido del acuerdo final.
Artículo 6: Vigencia.
La presente ley rige a partir de su promulgación.
Cabe recordar que los negociadores de las Farc han manifestado que el plebiscito para la paz no fue negociado en Cuba y por ende esa guerrilla no lo ha aceptado hasta el momento.
Puntos relevantes:
– La decisión de instaurar un umbral del 13 %, es decir, para ser aprobado un poco más de 4 millones 500.000 personas deberán salir a las urnas a votar por el Sí, y además de eso ser mayoría sobre el No.
– Se señala que el plebiscito tendrá un efecto vinculante. O sea que tanto el gobierno como el Congreso quedan con la obligatoriedad de implementar los acuerdos de paz.
– Se obliga a que un mes antes de la fecha de votación deberá existir una pedagogía y socialización de los acuerdos de paz en todo el país.
– El Estado financiará las campañas por el No y por el Sí. Se otorgarán las mismas garantías para ambas.