Falló la «chismografía estadística»
Por: Jorge Giraldo Acevedo
Sí bien el triunfo del presidente candidato, Juan Manuel Santos Calderón, fue un hecho contundente también es cierto que disminuyó del 60% a más del 52% el fenómeno político de la abstención para la elección presidencial y también del debate electoral podemos concluir que las empresas encuestadoras fracasaron en sus proyecciones y se constituyeron en las perdedoras, igual que el candidato del «Centro Democrático», Óscar Iván Zuluaga Escobar.
Perdieron las 4 empresas encuestadoras en el debate electoral del anterior domingo debido a que Napoleón Franco, Gallup y Polimétrica, dieron como ganador a Óscar Iván Zuluaga Escobar por 49, 48 y 43%, respectivamente, mientras que la firma Datexco, daba a Juan Manuel Santos Calderón como triunfante por el 41%.
La absoluta verdad fue que Santos Calderón ganó con el 50% de la votación frente a Zuluaga Escobar que logró el 45%.
Con este hecho contundente queda claro que quedaron muy mal con sus presagios las empresas encuestadoras que mediante consultas a un reducido grupo de ciudadanos se atreven a vaticinar resultados como si una situación tan seria como una jornada electoral presidencial fuera cuestión de un juego o el azar.
Entonces lo mejor que la ciudadanía en general puede hacer es no creer y mucho menos dar crédito al síndrome cultural de la “chismografía estadística” pues como quedó demostrado, una vez más, el verdadero resultado de una elección siempre estará en las urnas y nunca en las adivinanzas de las firmas encuestadoras.
Al volver al tema de la elección, en segunda vuelta para la presidencia, tenemos que sin lugar a dudas y con base en lo expuesto en las campañas se impuso el deseo de los colombianos por la paz, situación que actualmente busca con las FARC el presidente reelegido Juan Manuel Santos Calderón.
Pero de todas maneras la apatía electoral continúo en la mayoría de la población nacional en el debate del anterior domingo y por eso siguió predominando la abstención.
No concurrieron a las urnas más de 17 millones de cerca de 33 millones de ciudadanos aptos para votar y esa sí es una realidad estadística y no producto de «chismografía».
A manera de Posdata:
Debido al resultado de la votación por la Presidenca de la República de Colombia del anterior domingo el país continúa con el calificativo de Nación con una democracia a medias; esta situación se presenta por el hecho concreto de la baja intervención de la mayoría de personas aptas para votar en el debate electoral y, en consecuencia, no existe una democracia representativa de la mayoría de los habitantes.