Alexandra y Cartas desde el seno de mi padre
Esto es como para escribir una novela de superación y de constancia, por lo menos eso fue lo que sentí cuando escuché en el programa Club de Lectura de Caracol Radio una conversación que sostenía el periodista Norberto Vallejo con la autora del libro “Cartas desde el seno de mi padre”.
No sé si los lectores y escuchas en ese momento se quedaron petrificados al escuchar no solo el testimonio de vida de Alexandra Zuluaica Betancur, complementado con las vivencias del periodista Vallejo.
Vale la pena anotar que Norberto vallejo se ha atrevido en una radio comercial a hablar sobre libros, a dar a conocer los nuevos escritores, destacar los grandes escritores y recordar “que cuando uno lee un libro, no vuelve a ser el mismo” y este eslogan se cumplió con el solo escuchar el testimonio de Alexandra cuando habla de su padre, lo que tuvo que sufrir ella misma al padecer un cáncer y al darse cuenta que el motor de su vida se iba para siempre.
De verdad “Cartas desde el seno de mi padre” es un libro objeto, como lo llama su autora que rescata el estilo epistolar y que lo lleva a uno a reflexionar sobre la importancia de la vida y del amor fraternal.
Es un libro para quienes han padecido cáncer y han salido avantes y para las familias que han tenido que soportar la partida de sus seres queridos.
Alexandra Zuluaica Betancur nació en Medellín hace 39 años, estudió ingeniería administrativa, luego psicología y se especializó en gerencia del desarrollo humano; ha desempeñado cargos de Gestión Humana por más de 10 años y a pesar de siempre estar activa laboralmente, sentía que esos roles no la llenaban porque cree que vinimos a la tierra a cosas más grandes que solo estudiar y trabajar.
Su familia ha sido motor para cumplir sus sueños, sus padres Jaime y Lucia le enseñaron a ella y a su hermana Natalia amor, unión y compromiso con lo que hicieran en la vida.
Su vida transcurría normal hasta que en agosto de 2014 llega el diagnóstico de cáncer de mama, una noticia fuerte que ella asumió como un proceso de sanación y no como enfermedad; sin embargo, sintió morir cuando quince días después de su primera cirugía a su padre lo diagnostican con cáncer de estómago, el ser que más ha amado, pero gracias a su fe y al amor de las personas a su alrededor los dos decidieron caminar el sendero del cáncer con toda la actitud positiva. Luego de la tercera quimio su padre se coloca muy mal y trasciende, Alexandra sigue con dolor, pero con más fuerza su proceso y es así como pasa 3 cirugías, 16 quimioterapias y 25 radioterapias. Al finalizar el proceso se hace la pregunta ¿para qué quedé viva? y por varias causalidades decide escribir su historia para contar cómo vivió el proceso y cuáles aprendizajes le dejó y el producto final es «Cartas desde el seno de mi padre» un libro objeto que rescata el estilo epistolar, en un formato innovador y que lleva píldoras de amor y fuerza para quien atraviese una situación no agradable en su vida, es un texto que Alexandra define como «Quimioterapia para el alma».
Todo este proceso le cambió su vida, se encontró con la escritura y con su misión de vida, ella cree que para hacer una mejor sociedad cada persona puede aportar su semilla pero se necesita toma de conciencia y ella lleva un mensaje de autocuidado integral para empezar a generar microresultados positivos para la sociedad.
Decidió ir tras ese sueño, tiene su marca «Chomis», se dedica a dar conferencias inspiracionales, a promocionar su libro y a atender pacientes. ¿Por qué Chomis? Así le decía su padre, él que es el inspirador de su proyecto y el destinatario de las cartas.