El CEDAE: una década de conocimiento para la democracia
Por: Juan Carlos Galindo Vácha
Registrador Nacional del Estado Civil
En agosto de 2007, en medio de un corto período al frente por la Registraduría Nacional, tuve la oportunidad de crear el Centro de Estudios en Democracia y Asuntos Electorales, CEDAE. El objetivo fue entregarle a la entidad y al país un centro de carácter académico y técnico dedicado a brindar capacitación y formación sobre temas electorales, de identificación, cultura cívica y democracia, tanto para nuestros funcionarios como para la ciudadanía en general.
La consolidación del nuevo proyecto y el balance al cabo de diez años de labores nos plantearon, además, la necesidad de intensificar e incentivar la investigación y el análisis de temas fundamentales para la nación relacionados con el sistema de gobierno y sus dinámicas, así como de los procesos electorales y por supuesto la importancia de la promoción y divulgación de esta producción académica.
Eventos con la presencia de expertos de gran reputación, escenarios diversos y temas tan amplios relacionados con el ejercicio de la política, llevaron al CEDAE a convertirse en poco tiempo en uno
de los promotores, por excelencia, de espacios dedicados a pensar, debatir y compartir experiencias y conocimientos sobre asuntos vitales para el ejercicio de la democracia colombiana.
Desde 2008 hasta los primeros meses del presente año, el registro da cuenta de al menos medio centenar de eventos entre foros, paneles, conversatorios, programas de capacitación y mesas de trabajo, concentrados en asuntos tan trascendentales como la transparencia, la participación ciudadana, escrutinios, misiones electorales, resultados y buen gobierno, entre otros.
Hoy, diez años después, tengo el privilegio y la gran oportunidad de estar de regreso en esta querida institución y poder celebrar con entusiasmo la primera década de actividades del CEDAE,no solo con alegría sino también con hechos.
Por eso a partir de 2016 decidimos incluir otro eje fundamental para este Centro como es el fortalecimiento de valores cívicos y democráticos en niños y jóvenes, a través del programa “Todos Somos Democracia”.
Desde entonces le sumamos una tarea adicional al ejercicio diario de nuestra función misional: promover el conocimiento y la importancia de la participación y los valores cívicos y democráticos en el País con el objetivo de actuar, decididamente, frente al fenómeno del abstencionismo cuyos mayores índices se registran entre la juventud.
Visitas guiadas a la Registraduría y a todos sus procesos técnicos, un museo itinerante que ha visitado los sitios más alejados de nuestra geografía, la elección del gobierno juvenil con alcaldes y
concejales, la promoción de la participación mediante conversatorios, capacitaciones e incluso juegos didácticos, son solo una muestra del valioso aporte del CEDAE durante estos dos últimos años.
Es pues tiempo de celebrar por un satisfactorio balance y una década de trabajo incansable que mantendremos sin bajar la guardia hasta el final de esta administración.
Uno de mis propósitos como Registrador Nacional del Estado Civil, es dejarle al país un centro de pensamiento que ayude a fortalecer aún más nuestra democracia.
