El 28 de julio de 2024 quedó marcado en la historia de Venezuela como un día donde el pueblo venezolano demostró, de manera pacífica y contundente, su deseo de cambio a través de la acción del voto, un derecho consagrado en nuestra constitución nacional. Esta jornada electoral no solo será recordada por su significancia política, sino también por la movilización masiva y el espíritu cívico que se vivió en todo el país.
El fútbol, ese fenómeno social con nacionalismo y regionalismo desenfrenado cuando juegan los clubes o la selección, por el fanatismo desbordado o el periodismo vociferante calentando el ambiente. Con altisonancia en las celebraciones, las justificaciones, en las opiniones rotundas, en los favoritismos o en las críticas.
El pasado 28 de julio se celebraron elecciones presidenciales en Venezuela, un país sumido en una profunda crisis política, económica y social por décadas. Los comicios, que fueron cuestionados por la oposición y la comunidad internacional por un evidente fraude y falta de garantías, dieron como ganador al actual mandatario Nicolás Maduro, con el 68% de los votos, según el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Haciendo un análisis concienzudo de lo que está sucediendo en el país y de lo que ha sucedido en estos dos años, nos podemos dar cuenta que el gobierno del presidente Petro perdió el año o mejor perdió los dos años y no sabemos cómo se va a recuperar en lo que queda faltando de mandato que son dos años, en donde esperamos que no cometa más errores para que no afecte más al país de lo que lo ha afectado.
Los que tildaban al gobernador de Caldas Henry Gutiérrez de “lizcanopetrista”, desde la campaña política y aún hoy, y los que votaron por él y ahora están arrepentidos, lo critican porque no ha asumido su mandato en serio debido a que delega algunas de sus responsabilidades en un asesor y en el secretario privado Manuel Orlando Correa, quien ordena, quita y pone, tal como lo he comentado en otras oportunidades.
En ambos he participado como enviado de prensa, lo que me ha permitido sopesar el impacto universal de las justas, las connotaciones de los triunfos en tantas disciplinas, los dramas, el fervor del público, el interés que despiertan desde el comienzo hasta el final y el valor de la consagración de los atletas.
Apenas se ven los cuerpos doblados y los cascos. Ahí va un número considerable de ciclistas, que pedalean a la velocidad de los vuelos de Supermán por las carreteras que conectan los municipios. Miles de aficionados, profesionales y mujeres se suben en estas máquinas para pedalear durante horas, cumpliendo con un ejercicio que ennoblece, que conecta el cuerpo con la mente, mejorando reflejos, lateralidad y decisiones.
Si las EPS o las IPS no están en capacidad de atender oportunamente a sus vinculados, debe tramitar ante el Gobierno Nacional su liquidación. La «Nueva EPS» , que tiene el mayor número de afiliados al sistema de salud en Colombia, también sigue ocupando la marca principal en materia de reclamos por sus servicios, ante la Superintendencia del ramo.
Sin lugar a duda la noticia política más importante a nivel internacional es el retiro del presidente de los Estados Unidos John Biden como candidato a la presidencia de ese país para las elecciones del 5 de noviembre, donde esperaba continuar luego de su reelección. Se vio obligado a retirarse por asuntos de salud, estaba muy delicado últimamente,
Terminó la Copa América 2024 que se jugó en los Estados Unidos de América y dejó un campeón, Argentina, quien se convirtió en bicampeón del mismo certamen, una Argentina que no se mostró, que trabajó de bajo perfil y como dice el adagio popular “con nadadito de perro” llegó y se quedó con el trofeo. Colombia fue sin lugar a dudas el mejor equipo del certamen norteamericano,
