Nos dolió en lo más profundo del alma la muerte, en Bogotá, de nuestro dilecto pariente y amigo, Mario Caderón Rivera, una de las inteligencias superiores del departamento de Caldas, región a la que amó, representó y defendió con gran vehemencia.
Una mañana de un domingo electoral le preguntamos en las escalinatas de la Catedral a don Pacho Aristizábal—el papá de Esperanza– ¿por quién iba a votar y por qué?
«No le sirve a Colombia ese salario mínimo convertido en verdadero culto a la pobreza».
La Feria de Manizales –la que hizo las ferias en América, gracias a la inventiva del inolvidable odontólogo Oscar Hoyos Botero, uno de los mejores hijos de Caldas— celebra desde el 4 de enero la edición 58 de su evento anual, con la pompa, el resplandor y el éxito de siempre.
Desde el pasado 20 de noviembre, Colombia quedó bajo el peligro de que Juan Manuel Santos logre reelegirse, objetivo que están apalancando con el reparto de tanta mermelada que hasta pueden indigestar a más de uno de sus conmilitones, tanto en el mundo público como en el de algunos magnates privados.
Frente a las grandes dosis de radicalismo puro, de intolerancia, de exclusión, impuestas por el nuevo inquisidor de esta historia violenta e injusta de la cual somos protagonistas los colombianos, me propuse, -inspirado por mi amigo Arturo Uscategui- reflexionar acerca de lo que somos y de lo que necesitamos para cumplir nuestra misión aquí donde estamos.
El Colectivo Mambrú –del cual forma parte La Barca de Calderón—ha resuelto incursionar en el terreno de la futurología del año nuevo, en virtud de que el calendario que nos estrenaremos mañana miércoles promete ser uno de los más apasionantes de la segunda década del siglo XXI.
2014 será año de definición de noticias en desarrollo Por Rudames El 2014 será el año quizá el más importante para el fútbol colombiano, pues el regreso a un mundial de este deporte y de conseguir por primera vez estar en el top 10 de los clasificados por la FIFA, hacen pensar que se puede esperar mucho de las justas que tendrán como sede el país de los cariocas. Pero no solo será…
(Una producción del Colectivo Mambrú) CABALLERO SIN HEREDEROS Antonio José Caballero no dejó herederos directos de sus bienes, representados en una opulenta discoteca y una biblioteca bien surtida. Antes de cada viaje a Cali, “Terciopelo” prometía buscar a una muchacha valluna que decía tener un hijo suyo, pero nunca le alcanzaba el tiempo para organizar la práctica de una posible prueba de ADN. Estuvo la semana completa en compañía de Orlando Cadavid y…
Antonio José Caballero coincidía en algunas asuntos con el excéntrico aventurero de la ficción de Julio Verne. Su riqueza, no la del capital en rama, estaba representada en el amor inconmensurable que siempre profesó por el periodismo, atrincherado entre micrófonos y grabadoras, cabinas radiales, salas de edición.
