
“El profe” Montoya, no es cuerpo estorbo, es alma libre
Día a día proporciona una inspiradora visión de la vida, sin movimientos en su cuerpo, cuadripléjico, pero dueño de ideas, pensamientos, mensajes y optimismo. Veinte años lleva atado en silla de ruedas, acostado en una cama, en medio de especiales atenciones de los médicos y asistentes de la salud, con su esposa Adriana y su hijo Santiago, sus familiares y sus amigos, del fútbol, soporte inquebrantable para enfrentar su desventura.