El beso de Judas… o del ídolo
Ningún jugador por poderosa que sea su imagen, con presencia fija en los medios, con talento y clase, puede, por sí solo, garantizar que llevara a su equipo a un título. Talento sin esfuerzo, no sirve. Quizás Pelé y Maradona, aunque ellos también como Messi y Cristiano Ronaldo, se rodean de estrellas